El Gobierno ruso advierte a las petroleras sobre las bruscas subidas de precio de la gasolina

El vice primer ministro ruso, Alexandr Novak, ha pedido a las compañías petroleras del país cumplir los planes de producción de combustible y advirtió de que no se puede permitir bruscas subidas de los precios de la gasolina.

"No se puede permitir el brusco aumento de los precios de la gasolina", dijo Novak, responsable del bloque de energía del Gobierno, en una reunión con ejecutivos de compañías petroleras y altos cargo de Servicio Federal Antimonopolio, según informó la agencia oficial rusa TASS.

Hizo hincapié en que el Ministerio de Energía y las petroleras deben estar pendientes de los suministros de combustible al mercado interno para satisfacer la mayor demanda de los consumidores en el período estival y cuando comience el otoño.

"Para ello es necesario garantizar su venta uniforme en la bolsa, y también evitar que las compañías petroleras se compren productos entre sí en la Bolsa. Deben comprar productos petrolíferos mediante contratos directos", recalcó.

Rusia y la gasolina

Hizo un llamamiento a las petroleras a cumplir los plazos de reparación y posterior puesta en marcha de las refinerías y cumplir los planes de producción.

Y es que desde el comienzo de la guerra de Ucrania, en febrero de 2022, las refinerías de crudo rusas se han convertido uno de los principales objetivos de los ataques ucranianos con drones, que buscan mermar los suministros de combustible a las Fuerzas Armadas de Rusia.

Para paliar esta situación, Rusia prohibió la exportación de gasolina a las compañías no productoras hasta el próximo 31 de agosto.

La medida restrictiva no se aplica a las grandes petroleras que producen más de un millón de toneladas anuales.

Sin embargo, según fuentes citadas por la agencia Intefax, el Gobierno no descarta la posibilidad de extender la prohibición a las grandes petroleras si se deteriora la situación en el mercado interno.

Novak llamó también la atención de la estatal Ferrocarriles de Rusia sobre la necesidad de reducir el periodo de inactividad de los vagones tras su descarga, por el impacto de esta en los suministros.