El sistema eléctrico español está totalmente irreconocible. A los 550 millones de superávit que hubo en 2014, hay que sumar ahora cerca de 1.000 millones que arrojará 2015, según los datos provisionales de la liquidación 14/2015 publicada este miércoles por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Según este informe, el superávit provisional (falta por conocer la liquidación definitiva antes del 1 de diciembre de este año) es de 251,5 millones de euros. En la liquidación 13 había déficit provisional de más de 400 millones, por lo que ha habido un gap de más de 600 millones entre las dos últimas liquidaciones.
Esto se ha debido en gran parte a que los costes del sistema han sido menores de lo previsto. Concretamente en 486 millones de euros, debido principalmente a una menor retribución a las renovables y a menores pagos por capacidad.
Sin embargo, para alcanzar la cifra cercana a los 1.000 millones hay que revisar el capítulo de ingresos, sobre todo, lo referente a los impuestos. La liquidación 14 muestra que Hacienda ha ingresado al sistema 2.479 millones de euros. Repartidos así:
- Impuesto sobre el valor de la producción de la energía eléctrica 1.247,7 millones.
- Impuesto sobre la producción nuclear 248,6 millones
- Impuesto el almacenamiento de residuos nucleares 6,7 millones
- Canon por utilización de las aguas continentales para la producción de energía eléctrica 13,3 millones
- Impuestos especiales sobre los hidrocarburos 394,3 millones
- Impuesto especial sobre el carbón 225,1 millones
- Ingresos procedentes subastas CO2 343,3 millones. Esta cifra queda muy lejos de los 3.125 millones que había calculado el Ministerio para ingresar. A día de hoy, la CNMC reconoce que tiene un certificado de Hacienda pendiente de cobro valorado en 435 millones por lo que los ingresos por impuestos del sistema ascenderían como mínimo hasta los 2.914, 8 millones.
Además, en el certificado no entra ni un euro sobre el canon hidroeléctrico por lo que cabría esperar unos ingresos de unos 227 millones de euros más.
Si se suman estas cantidades a los 251,5 millones de superávit, éste alcanzaría como mínimo unos 915 millones de euros. A poco que los costes finales se reduzcan el superávit se irá hasta los 1.000 millones de euros.
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