Eni ha presentado hoy su Plan Estratégico 2023-2026, con el que priorizará el fortalecimiento de la seguridad y diversificación energética de Italia, en el contexto de relaciones con Rusia, y tratará de acabar con las emisiones en 2050.
"Hoy podemos prever claramente como será Eni en 2030: nuestras emisiones en el sector 'Upstream' (exploración y producción) ya no generarán emisiones y nuestra producción de hidrocarburos será de gas principalmente", resumió el consejero delegado, Claudio Descalzi.
La hoja de ruta de la energética prevé reducir en un 35% para 2030 las emisiones de gases de efecto invernadero "Scope 1, 2 y 3" (directas, indirectas en la generación de energía y las restantes vinculadas a la actividad de la empresa).
El objetivo pasa por descenderlas en un 80% respecto a las de 2018 para el año 2042 y acabar con ellas, llegar al cero neto, en 2050.
El suministro de gas para Eni
El primer punto del Plan Industrial defiende el fortalecimiento de la "seguridad energética" nacional a través de la diversificación geográfica y tecnológica.
Una cuestión clave para Italia, que tras la invasión de Ucrania hace un año ha sustituido a Rusia por Argelia como primer proveedor de gas, en su estrategia de no depender de Moscú (que antes de la guerra vendía el 40% del gas que se consumía en el país europeo).
En este sentido, Descalzi recordó que en los últimos tiempos ya han diversificado sus inversiones en distintos países, lo que permitirá aplicar una sustitución de 20.000 millones de metros cúbicos de gas ruso para 2025, una medida integrada también en el Plan Industrial.
Eni aprobará también una serie de inversiones como instalaciones en Libia, en la ciudad árabe de Hail o en la isla de Ghasha de los Emiratos Árabes Unidos, así como la expansión de sus negocios en el Golfo Pérsico, en la Costa de Marfil, Kazajistán, Angola y el área del Mediterráneo oriental.
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En cuanto a la producción, estima un crecimiento medio del 3-4% en los próximos cuatro años y la cuota del gas en sus actividades subirá hasta el 60% en 2030.
"Esto nos permite confirmar plenamente nuestros objetivos de descarbonización a pesar del escenario actual para la seguridad energética y la necesidad de responder a una fuerte demanda de energías tradicionales", apuntó el consejero delegado.
El gigante energético confirmó hoy que en 2022 obtuvo un beneficio neto de 13.810 millones de euros, un 137 % que los 5.821 millones del ejercicio anterior, aunque tras la presentación del Plan Estratégico sus acciones cayeron en la Bolsa de Milán.
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