España necesitaría multiplicar por ocho los puntos de recarga para cumplir sus objetivos

España necesitaría multiplicar por ocho el ritmo actual de instalación de puntos de recarga para cumplir sus objetivos de electrificación, según señala un informe del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Madrid (COIIM), que fija para 2026 la paridad de precios entre los eléctricos y los de combustión.

El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) fija como objetivo alcanzar 5,5 millones de vehículos eléctricos y más de 100.000 puntos de recarga en 2030. Sin embargo, las cifras actuales están aún muy alejadas, apunta el estudio.

"La electrificación no puede avanzar sin realismo", reconoce el decano del COIIM, Fabián Torres, que agrega que se necesitan infraestructuras, un marco estable y un apoyo claro a tecnologías complementarias como los combustibles renovables.

Paridad de precios en 2026 y en 2030 serán más baratos

El estudio considera que en 2026 se alcanzará la paridad de precios entre los vehículos eléctricos y los de combustión, y que en 2030 podrían ser incluso un 30% más baratos.

Por otro lado, el documento advierte de la creciente presión de la competencia internacional, con China a la cabeza en producción y exportación de vehículos eléctricos y en control de materias primas críticas.

La UE ha anunciado aranceles antidumping de hasta el 35% a algunos modelos producidos en China, pero el COIIM alerta de que estas medidas deben acompañarse de más inversión en innovación, diversificación de suministros y refuerzo de la cadena de valor europea.

En paralelo, la UE exige 0 emisiones netas en 2035, y programas como el Perte VEC o el Plan Moves buscan incentivar el cambio. Sin embargo, el Colegio reclama mayor agilidad administrativa y un marco más atractivo para atraer inversiones.

Otras vías para la descarbonización en el sector

El COIIM insiste en que la electrificación no puede ser la única vía para la descarbonización y que tecnologías como los biocarburantes avanzados, los e-fuels o el hidrógeno, son soluciones viables en sectores donde la electrificación directa es difícil, como el transporte pesado, la maquinaria industrial o la aviación.

Para mantener la competitividad, el COIIM propone reforzar la inversión en I+D+i y producción propia; acelerar el despliegue de infraestructuras de recarga; impulsar la formación técnica especializada; adaptarse a nuevos modelos de movilidad, como el leasing o el carsharing y consolidar un marco regulatorio estable que facilite la inversión.