La factura de la luz repuntó un 11% en junio y fue la segunda más cara del año

La factura de la luz en junio aumentó un 11,41 % respecto a la de mayo, al alcanzar los 52,51 euros, lo que la convirtió en la segunda más alta de este año tras la de enero, y en la cuarta de 2024 en la que se ha aplicado un IVA del 21%.

Según el simulador de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el recibo para un consumidor acogido a la tarifa regulada o PVPC con una potencia de 4,4 kilovatios (kW) y un consumo mensual de 60 kilovatios hora (KWh) en horario punta, 70 KWh en el llano y 120 KWh en el valle fue de esos 52,51 euros.

Fue 5,38 euros más caro que el de mayo y el segunda más alto de este 2024, tras el de enero, cuando alcanzó los 54,49 euros.

Además, la factura de junio fue 1,16 % más barata (62 céntimos menos) que la del mismo mes de 2023, cuando aún se aplicaba el IVA del 5% para paliar los efectos en el consumidor de los altos precios de la electricidad y no del 21 % de los cuatro meses de este año (marzo, abril, mayo y junio) al no superar la electricidad en el mercado mayorista los 45 euros/MWh en el mes precedente.

La factura de la luz y el IVA

El Gobierno aprobó que el IVA del recibo de la luz para 2024 fuera del 10%, pero si la media del precio mayorista en un mes no superaba esos 45 euros/MWh, el impuesto se incrementaría en el siguiente hasta el 21% a todos los consumidores, tanto a los del mercado libre como a los del regulado.

La revisión al 21% no afecta a los consumidores considerados vulnerables, para los que se mantiene el IVA al 10% en 2024.

En junio del año pasado, además, el Impuesto Especial de la Electricidad (IEE) era sólo del 0,5%, frente al 3,8% que se ha aplicado en este mes de junio.

En julio baja el IVA, pero sube el IEE

Las medidas para evitar que se disparase la factura por los altos precios energéticos van decayendo, aunque en julio el IVA volverá a ser del 10 %, ya que este mes de junio, a diferencia de lo que ha ocurrido en los cuatro meses anteriores, la media mensual de la electricidad en el mercado mayorista ha superado los 45 euros/MWh, al llegar a los 56,08 euros/MWh.

Sin embargo, en julio sube otro de los impuestos que el Gobierno redujo para hacer frente a la crisis de los altos precios, el Impuesto Especial a la Electricidad, que estuvo hasta finales de 2023 en el 0,5% y que ha ido recuperándose gradualmente en este 2024.

Así, en el primer trimestre de este año ha sido del 2,5% y en el segundo del 3,8%, pero a partir de este 1 de julio retorna a su tipo habitual del 5,11%.

Reducción de los descuentos del bono social

En la desescalada de medidas que el Ejecutivo dispuso para paliar los efectos de la subida de los precios de la energía a los consumidores está también la reducción de los descuentos que el Gobierno amplió para los beneficiarios del bono social, que tienen que tener la tarifa regulada o PVPC, aunque no será hasta el último trimestre de este año cuando se aplique la primera rebaja de los porcentajes.

Actualmente están vigentes unos descuentos en la factura de la luz del 65 % para los consumidores vulnerables y del 80 % para los vulnerables severos, que se van a mantener hasta el 30 de septiembre.

A partir de entonces, se aplicará una reducción del descuento de 7,5 puntos porcentuales por trimestre.

De esta manera, del 1 de octubre al 31 de diciembre de 2024 el descuento para los consumidores vulnerables será del 57% y del 72,5% para los severos.

La rebaja será del 50% para los vulnerables y del 65% para los severos del 1 de enero de 2025 al 31 de marzo de 2025; mientras que, del 1 de abril de 2025 al 30 de junio de 2025, será del 42,5% para los primeros y del 57,5% para los segundos.

A partir del 1 de julio de 2025 para los consumidores vulnerables será del 35% y del 50% para los vulnerables con carácter indefinido; porcentajes que superan los que había antes del estallido de la crisis energética, que eran del 25% y del 40%, respectivamente.