El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha defendido la eliminación de los subsidios a los combustibles fósiles y una reforma en los precios de la electricidad, dejando fuera de la factura "los gravámenes y cargas sociales que no tienen nada que ver directamente con el negocio de generar, transmitir y suministrar electricidad", como claves para alcanzar los objetivos de la lucha contra el cambio climático.
En una columna en el diario 'The Times' con motivo de la Cumbre del Clima de Marrakech (COP 22) titulada 'Los coches eléctricos están en mal camino si usan energía sucia', Galán considera que la COP21 de París fue importante para fijar un listón "aún más alto" en los objetivos de reducción de emisiones, pero cree que será "será vital mantener ese impulso" garantizando que en Marrakech se implemente lo acordado en la capital francesa hace un año.
Junto a la eliminación de los subsidios a los combustibles fósiles y la reforma en los precios de la electricidad, Galán pide también mejorar el acceso a los 100.000 millones de dólares (unos 90.431 millones de euros) anuales de financiación que se acordó movilizar en París para alcanzar esos objetivos, así como "acelerar los esfuerzos" de los Gobiernos y las ONG en esos compromisos de reducción de emisiones.
EL PAPEL "CLAVE" DE LA ELECTRIFICACIÓN
Además, Galán defendió el papel "clave" de la electrificación para que el sector del transporte alcance los objetivos de emisiones cero y para afrontar el reto de que "el acuerdo histórico" de la COP21 de París del año pasado se convierta "en una realidad".
Así, el directivo considera que la electrificación es "la clave para aumentar la sostenibilidad del sector energético" y subraya que en el futuro los productos y procesos realizados por los combustibles fósiles se llevarán a cabo por electricidad procedente de fuentes renovables.
A este respecto, Galán señala que se están haciendo progresos, como revelan los datos de la Agencia Internacional de la Energía (AIE, por sus siglas en inglés), que sitúan a las renovables como la mayor fuente de energía del mundo por delante del carbón, aunque subraya que también es necesario asegurarse de que en ese camino hacia la descarbonización se sigue garantizando el suministro de energía "seguro y asequible".
Para ello, señala la necesidad de "aumentar la competitividad de las fuentes de energía renovables", el desarrollo de las redes inteligentes necesarias para integrar de manera más eficaz las fuentes de energía centralizadas y distribuidas y un incremento de la eficiencia energética.
"También significa utilizar la tecnología de manera más inteligente para que podamos almacenar la energía renovable que producimos en los días en que el sol no brilla o el viento no sopla", añadió al respecto, subrayando que Iberdrola es un ejemplo "viviente" de que "esta revolución es real", como el primer productor de Europa de renovables, con las emisiones más bajas del sector.
Así, Galán destaca que la industria energética debe demostrar que la creación de riqueza y la lucha contra el calentamiento global "no son excluyentes".
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