La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha anunciado que el Gobierno activará un proceso de consulta con todos los actores del sector energético para llevar a cabo un despliegue "ordenado" de las energías renovables que repercuta en beneficio de los territorios.
En concreto, la idea es impulsar los objetivos de generación renovable hasta un 81% para 2030, acorde con el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), cuya actualización Ribera confía en tener aprobado en los "próximos meses".
Este es uno de los anuncios que la vicepresidenta ha hecho durante su comparecencia en el Congreso para detallar las líneas generales de su departamento en esta legislatura.
El despliegue de las renovables
En su opinión, el impulso a las renovables requiere de una visión "ordenada y justa", de modo que se vele por que en el territorio las cosas "se hagan bien" y estas renovables aseguren una "adecuada redistribución de los beneficios".
Por eso, el Ejecutivo planea reunirse con los diferentes actores implicados en la industria para identificar las mejores "prácticas y cautelas" para conciliar los distintos objetivos en un despliegue "ordenado" de energías renovables. Así, se combinaría la zonificación y acceso a beneficios por parte de los territorios con mejoras y capacidad de gestión de la integración renovable.
Recuperar la CNE
Pero no es el único desafío que el Ministerio se ha puesto en la legislatura. La ministra ha asegurado que también se pretende activar la energía eólica marina, que cuenta con una ordenación del espacio marítimo que identifica cuáles son las zonas que puedan resultar más adecuadas.
"Falta ahora culminar la regulación garantista y activar las palancas necesarias para desarrollar esta tecnología", ha señalado Teresa Ribera.
Sumado a esto, la vicepresidenta ha recordado que el Gobierno también pretende recuperar la Comisión Nacional de Energía (CNE) como herramienta "fundamental" para reforzar la transición energética y acompañar a los consumidores que más lo necesitan en sus hogares o en su movilidad.
"Es una herramienta clave contra la emergencia climática y un instrumento de eficacia comprobada en la transformación de nuestro modelo productivo. Tiene un potencial enorme para ayudarnos", ha defendido Ribera.
Pobreza energética
Además, la ministra ha dicho que ahora corresponde elaborar una nueva estrategia nacional contra la pobreza energética sobre la base de lo aprendido estos años.
Ribera ha afirmado que la lucha contra la desigualdad "también se libra en la energía" y se ha referido al Fondo Social sobre el Clima.
En este punto, ha señalado que España necesitará una respuesta financiera y regulatoria propia para acompañar durante la transición energética a los consumidores que más lo necesitan.
Ribera también se ha referido a la central de carbón de As Pontes (A Coruña), ya clausurada, y ha señalado que, aunque hoy por hoy no hay capacidad disponible para sacar a concurso el nudo de la planta, esto no pone en riesgo ninguno de los proyectos planificados en la zona.
La ministra ha indicado que habrá una subestación de 400 kilovoltios y otros 400 kilovoltios para reforzar la red que aflorarán nueva capacidad de acceso para proyectos de energías renovables que afiancen la competitividad de la industria gallega.
En cuanto al tramo del proyecto de la red troncal de hidrógeno del hidroducto H2Med que la Comisión Europea (CE) dejó fuera de los proyectos susceptibles de recibir ayudas y que la Xunta de Galicia considera estratégico, ha avanzado que Enagás lo volverá a presentar.
Verde Claro
23/01/2024