Iberdrola presentó su nuevo plan estratégico ante inversores y analistas en Londres. La acción de la eléctrica española reaccionó de manera neutral al plan estratégico, después de un 18% de revalorización en lo que vamos de año.
Un plan estratégico esperado
La acción de Iberdrola abrió moderadamente en positivo, para seguir prácticamente en plano durante la sesión por la mañana. En un primer vistazo, los inversores entendieron que no había grandes novedades en el plan, respecto a lo que ya se había adelantado.
Iberdrola presentó un plan de inversiones muy similar al que ya había adelantado, con un total de inversiones brutas de €58 mil millones para el periodo 2025 a 2028, incluyendo el pago por el 30% de participación de su filian brasileña Neoenergia. En el informe publicado por el Consejo de administración el 22 de julio, en el marco de la aprobación de la ampliación de capital, Iberdrola ya había detallado también objetivos claros sobre su plan de inversiones.
La mayor parte del plan corresponde a inversiones brutas en redes, unos €37 mil millones acumulados. En la última presentación de resultados semestrales, el equipo directivo adelantó un objetivo de inversiones en redes de unos €55 mil millones en el periodo 2026-2031. En ambos casos, Iberdrola estaba hablando de inversiones brutas anuales por encima de los €9 mil millones.
Iberdrola presentó planes de inversiones relativamente avanzados en comparación con planes anteriores. El plan incluye inversiones en renovables donde el 75% del objetivo de nueva capacidad ya está en construcción, e inversiones en redes, que en gran parte ya están aprobadas por los reguladores y en algunos casos el retorno reconocido ya está fijado durante la duración del plan.
Un plan estratégico conservador
Otra percepción de los inversores respecto al plan y a los objetivos es que estos son conservadores. Durante la presentación del plan, el equipo directivo dejó claro que las hipótesis de crecimiento de la demanda eléctrica ya eran conservadoras.
La inversión en redes en cualquier mercado europeo tiene como objetivo deshacer cuellos de botella existentes para el acceso a conexión a la red. Iberdrola, al igual que otros operadores de redes, ha presentado un plan a medio plazo. Durante ese horizonte temporal se irá acelerando el acceso a la red a nueva demanda, acelerando el crecimiento de la demanda. Lo que ha presentado Iberdrola es un plan de choque, pero no las consecuencias de este plan.
Otro aspecto que alimenta esa percepción de plan conservador, es que éste se ciñe a los acuerdos regulatorios cerrados hasta el momento. Durante los próximos meses y años los diferentes reguladores van a seguir con el proceso de revisiones regulatorias no reflejadas en el plan.
Ese conservadurismo también se extiende a las inversiones en generación flexible. El equipo gestor dejó claro que no invertirán más de lo que se incluye en el plan en generación flexible, en ausencia de ‘’las señales adecuadas’’ por parte de los gobiernos para incentivar la inversión. Dada la actual fuerte demanda de generación flexible, un hipotético cambio de actitud por parte de los políticos se puede traducir también en cambios respecto a esa decisión.
Juan Ignacio
24/09/2025