Japón se convertirá en el mercado de eólica 'offshore' más grande de Asia después de China para 2030

Japón planea expandir su cartera de energía eólica marina para reorganizar su mix de generación de energía la vista de los problemas con la nuclear, el envejecimiento de las plantas de carbón  y la escasa disponibilidad de tierras. Con el avance de la tecnología eólica marina, la reducción constante de los costos de capital y un marco político favorable pueden ayudar a la explotación de los vastos recursos offshore disponibles y la cartera de proyectos actual para convertirlo en el mercado offshore más grande después de China en la región Asia-Pacífico (APAC), dice la firma de análisis y datos GlobalData.

Ankit Mathur, director de Energía en GlobalData, comenta: “Para 2030, entre los mercados eólicos marinos de APAC, es probable que Japón se convierta en el segundo mercado más grande detrás de China y comparta el podio con la ambiciosa Corea del Sur. La base de datos de GlobalData para la energía eólica marina japonesa muestra la presencia de una poderosa cartera de proyectos de 19 GW + en fase de desarrollo".

La Asociación de Energía Eólica de Japón (JWPA) garantiza 10 GW de energía eólica marina para 2030. La cartera de proyectos actual es suficiente para alcanzar el objetivo de 2030, pero para mantener la pelota en marcha para una expansión más suave, el gobierno y los actores de la industria tendrán que construir una plataforma de inversión sólida, infraestructura de evacuación de energía y cadenas de suministro locales para complementar la expansión.

Una intención positiva del gobierno, la extensión de las licencias de energía eólica marina y las tarifas de energía están atrayendo a grandes actores internacionales al campo de la energía eólica marina de Japón. Agentes offshore serios y experimentados como Orsted, RWE y Northland Power Inc ya se han asociado con empresas locales para obtener la ventaja de ser el pionero en un mercado atractivo que se convertirá en un considerable mercado offshore global.

Mathur concluye: “La cartera de proyectos eólicos marinos está llena de promesas. Sin embargo, a menos que se establezcan los inhibidores correctos, el objetivo de 10GW para 2030 se encontrará con varios obstáculos y podría ver reducida la construcción de capacidad a 7.4GW. Japón está a punto de unirse a los líderes internacionales en el extranjero y para garantizar una expansión sin problemas, el gobierno necesita crear un sector vibrante con políticas favorables, una cadena de suministro resistente y reduciendo los riesgos de las inversiones en el sector".