El Tribunal Superior de Australia ha desestimado por unanimidad una apelación presentada por España en una disputa internacional en torno a laudos dictados previamente por un organismo de arbitraje del Banco Mundial vinculados a los recortes realizados a las renovables.
La máxima instancia judicial australiana ha negado la solicitud de España, que argumentaba que podría tener "inmunidad soberana" frente a "los procesos judiciales australianos relativos al reconocimiento y ejecución de laudos arbitrales de acuerdo a la Ley de Inmunidad de Estados Extranjeros del país oceánico.
El caso se remonta a diversos recursos presentados por decenas de inversores internacionales, quienes denunciaron a España ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) y otras instancias internacionales de arbitraje internacional por la reducción de la rentabilidad prevista por numerosas instalaciones renovables a consecuencia de la política energética del Gobierno de Mariano Rajoy (2011-2018).
La dispuesta por las renovables
La CIADI, un organismo vinculado al Banco Mundial, impuso en 2017 y 2018 multas a España por los perjuicios que el recorte de las primas a las renovables causaron a las plantas termosolares amparándose en la Carta de Energía, una decisión que benefició a Infrastructure Services Luxembourg y Energia Termosolar, entre otras empresas.
Estos dos inversores llevaron el caso del pago de las indemnizaciones a Australia, en donde el pleno del Tribunal Federal ordenó a España en junio de 2021 el pago de la multa de 101 millones de euros impuesta por la CIADI, más intereses, de acuerdo al resumen del fallo de hoy publicado en el portal del Tribunal Superior.
Entre los puntos analizados por el Tribunal Superior, uno de los más espinosos se trataba de los términos utilizados en el proceso, como el "reconocimiento", la "aplicación" y "la ejecución" que estaban plasmados en la Convención del CIADI, pero que podían generar confusión a la hora de contrastar los textos del mismo en inglés, en francés y español.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios