Política energética  ·  Renovables

La caída del decreto antiapagones deja sin opción a 2.000 millones de inversión en solar fotovoltaica

Decenas de proyectos se caerán al no aprobarse la nueva prórroga de seis meses que daría tiempo para que se llevaran a cabo estas inversiones

3 comentarios publicados

Una de las principales medidas del decreto antiapagones es que iba a ayudar a los proyectos de renovables a tener una nueva prórroga en su proceso de desarrollo y así ganar tiempo para poder obtener las autorizaciones de construcción y levantar sus instalaciones en tiempo y forma.

Pero sin esa prórroga, sin el decreto antiapagones, son decenas los proyectos que se van a quedar sin desarrollar en España. Así lo cuenta José Donoso, director general de UNEF, la patronal fotovoltaica española, en declaraciones a El Periódico de la Energía. "Se van a caer muchos proyectos, más o menos unos 2.000 millones de inversión", ha asegurado.

Donoso se ha mostrado muy decepcionado por la clase política española "que no ha estado a la altura" de las circunstancias. "La política ha dado la espalda a una oportunidad histórica para avanzar en la transición energética", ha señalado sin llegar a comprender muy bien lo sucedido minutos antes en el Congreso de los Diputados.

El redactor recomienda

Riesgo político

En el sector fotovoltaico se han quedado preocupados por la nueva señal que se está dando a los inversores y a los fondos. "Ahora en España también hay riesgo político", dice. Hasta ahora la seguridad jurídica era el principal freno pero se había conseguido revertir atrayendo miles de millones de inversiones en los últimos años, pero la no aprobación del decreto antiapagones pone en riesgo al sector y los objetivos de los próximos años.

"Los fondos se pueden ir a otros mercados porque necesitan realizar sus inversiones", asegura Donoso, bastante preocupado con la situación.

También ha querido resaltar la oportunidad perdida con el almacenamiento, fundamental para los intereses de sus asociados que están todos queriendo hibridar sus instalaciones con baterías.

"Vamos a seguir con una tramitación tediosa y se van a retrasar muchísimos proyectos", afirmó.

Eso sí, espera que esto sea sólo un punto y aparte y en las próximas semanas o meses se puedan aprobar al menos algunas de las medidas que necesita el sector para seguir avanzando.

Noticias relacionadas

3 comentarios

  • galan

    galan

    23/07/2025

    La caída del decreto antiapagones deja sin opción a 2.000 millones de inversión en solar fotovoltaica.

    Ese es el objetivo de algunos políticos:
    Que no haya inversión en solar fotovoltaica, y de paso tampoco en almacenamiento en baterias.

    Pido al gobierno que no tire la toalla, y siga mejorando a España energéticamente.
    Las renovables, tienen que proporcionarnos electricidad, si o si.

    Ha habido tiempos peores y los hemos superado.
    El tiempo de las renovables a llegado.
    El futuro sera renovable, aunque alguien no lo quiera.




  • ElToni

    ElToni

    23/07/2025

    Bueno,

    si es por la FV ha venido bien porque no necesitamos más, y aun quedan muchos años para que las baterias (a gran escala) tenga sentido ; mejor no tirar el dinero en FV e invertirlo en otras renovable más flexibles y que eliminan más emisiones como el Biometano y podían dedicar ese dinero a prorrogar las nucleares. Estas dos medidas son mucho más eficaces para reducir las emisiones que las pajillas mentales del H2 verde y seguir inundando un mercado ya hundido como el de la FV......
    Esto y la eficiencia energética son los caminos reales para reducir emisiones sin arruinarse y ser más independientes energéticamente en plazos cortos y medios .........lo demás, cantos de sirena
  • naughty

    naughty

    23/07/2025

    A lo mejor, lo que necesitamos no son más km2 de huertos solares. Igual necesitamos optimizar la generación renovable que ya tenemos, aprovechando sobrantes vía almacenamiento. Y mirando los costes a largo plazo, ese almacenamiento es mejor que sea "a la portuguesa" (central de bombeo reversible del Támega), con agua que ya tenemos, de forma lo más distribuida posible por todo el territorio. Y no en baterías minadas en las 4 esquinas del globo, tratadas en China, ensambladas vete a saber donde y que cuando llega para ser instalada con una vida útil prevista de 10 años (despues de haber pagado varios cientos de millones por ellas), ha dado 3 o 4 vueltas al mundo. Y, por supuesto, en adaptar las redes de transporte para llevar la energía sobrante desde la generación eólica y solar a las centrales de bombeo y desde allí a la distribución. NO LO VERÁN NUESTROS OJOS.

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios

Este sitio web está protegido por reCAPTCHA y la Política de privacidad y Términos de servicio de Google aplican.