Tras el apagón eléctrico que afectó a gran parte del territorio español el pasado 28 de abril, la Asociación Empresarial Eólica (AEE) ha reclamado mayor transparencia en la gestión del incidente y una investigación profunda que tenga en cuenta no solo los elementos que desencadenaron el suceso, sino también las debilidades estructurales del sistema eléctrico.
Juan Virgilio Márquez, director general de la AEE, ha señalado en una entrada publicada este lunes en el blog de la asociación que “cualquier escenario vivido en el que se hayan constatado situaciones que han podido llegar a tensionar la operación del sistema, aunque no hayan devenido en un apagón, pueden ofrecer información valiosa para explicar lo ocurrido”.
En este sentido, Márquez advierte que limitar el análisis únicamente a los momentos exactos del apagón sería un error, y considera imprescindible abordar el problema desde una perspectiva más amplia, incluyendo todos los factores que intervienen en la operación diaria del sistema. Subraya que, aunque en el pasado se hayan producido condiciones similares sin consecuencias, no se puede asumir que estas condiciones por sí solas basten para evitar futuras interrupciones.
Un sistema más resiliente con renovables
Desde la AEE insisten en que la energía eólica, que ya representa la principal tecnología del mix eléctrico español, puede desempeñar un papel aún más relevante en la estabilidad del sistema si se activan ciertos mecanismos técnicos como el servicio de control de tensión en tiempo real o la normativa sobre inercia sintética (“grid forming”).
“La eólica es una tecnología fiable, distribuida y flexible, esencial para un sistema eléctrico resiliente”, destaca Márquez. Su capacidad de adaptación permite a los parques eólicos ajustar su producción en segundos ante variaciones de demanda o imprevistos, como ya se ha demostrado en los primeros meses de 2025, cuando Red Eléctrica de España (REE) redujo la producción eólica programada en un 0,83% sin comprometer la seguridad del suministro.
Además, la estructura distribuida de la eólica —presente en prácticamente todas las comunidades autónomas— proporciona una estabilidad territorial que refuerza al conjunto del sistema. Su producción, aunque variable, es altamente predecible y estable a corto plazo, lo que la convierte en una fuente confiable dentro de la transición energética.
Modernización del sistema
La AEE también hace un llamamiento a las instituciones públicas y al operador del sistema para que se fomente una colaboración bidireccional con el sector privado. Esta cooperación sería clave para desarrollar e implementar soluciones técnicas modernas que aseguren una operación estable sin tener que recurrir de forma permanente a tecnologías fósiles.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios