La nuclear, al final, siempre gana

Se dice que el fútbol es un juego de 11 contra 11 que al final siempre gana Alemania. Algo parecido sucede en el mix eléctrico. Da igual lo que suceda que al final siempre la nuclear se alza como la fuente de energía que más aporta a la demanda eléctrica de España.

No falla. Es la más fiable. Y eso hay que reconocérselo. En 2016 la energía nuclear ha vuelto a ser la fuente que más aporta al mix eléctrico. En concreto lo ha hecho un 22,9%, a pesar de que en los dos últimos meses del año el carbón ha sido la fuente más usada con holgada diferencia.

La eólica ha estado buena parte del año, la primera mitad, siendo la líder, pero sus últimos meses la han apartado de ese puesto y al final ha quedado en segundo lugar con el 19,3%.

El tercer puesto del podio lo ha obtenido finalmente la hidráulica, pero por muy poco lo ha conseguido aguantar frente al carbón. La electricidad generada en las centrales de agua han cubierto el 14,6% de la demanda, mientras que el carbón ha alcanzado el 14,3% tras ser de nuevo la fuente más usada en diciembre por segundo mes consecutivo.

El quinto lugar está compartido por la cogeneración y los ciclos combinados. La primera de ellas es muy constante durante todo el año. Suele estar en los mismos porcentajes. Así ha cerrado 2016 con un 10,5% de la demanda.

Los ciclos sin embargo han tenido que remontar, al igual que el carbón en los últimos meses para poder estar por encima de los dos dígitos.

Ya el resto de tecnologías están a bastante distancia. Así, la fotovoltaica ha generado el 3,1% de la demanda, la termosolar el 2,1% (total solar 5,2%), los residuos un 1,3% y otras renovables un 1,4% de la demanda.

En total, las renovables han conseguido cubrir más del 40% de la demanda

En resumen, España tiene un mix eléctrico en el que seis tecnologías distintas funcionan bastante a lo largo del año, que cubren perfectamente la demanda y que se sustituyen unas a otras cuando realmente hace falta. Muy pocos países pueden decir esto.