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La reforma de la ley alemana sobre almacenamiento de carbono supera el último obstáculo

El Bundesrat vota a favor de la importante reforma legislativa alemana para el desarrollo de la CAC

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El Consejo Federal alemán (Bubdesrat) ha aprobado una reforma que permite el almacenamiento de carbono en el lecho marino, habilita la construcción de gasoductos para el transporte de CO2 y excluye el uso de captura y almacenamiento de carbono (CAC) en centrales eléctricas de carbón. Esta votación supuso la aprobación definitiva de la importante reforma legislativa alemana para el desarrollo de la CAC.

La ley es “un elemento fundamental para descarbonizar nuestra economía”, y el nuevo marco regulatorio es “muy esperado por la industria”, dijo Stefan Rouenhoff, secretario de Estado parlamentario del Ministerio Federal de Economía, en una declaración plenaria.

En el lecho marino

La reforma permite el almacenamiento de carbono bajo el lecho marino del Mar del Norte. Además, otorga a los estados federados la opción de permitir el almacenamiento en tierra, pero está por verse si lo harán ante la oposición pública que ha sufrido esta tecnología durante años.

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A principios de este año, el gobierno alemán presentó la reforma necesaria para permitir la amplia aplicación de la captura y utilización de carbono ( CAC y CCU ) en el país. Afirmó que las tecnologías para capturar, transportar y almacenar permanentemente dióxido de carbono en el subsuelo son indispensables para alcanzar los objetivos alemanes de neutralidad climática para 2045 y emisiones netas negativas después de 2050. El gobierno también señaló que la CCS es necesaria para mantener la competitividad.

Críticas

Los investigadores en energía y clima también afirman que la captura y almacenamiento de carbono (CAC) será necesaria hasta cierto punto para alcanzar los objetivos climáticos internacionales. Sin embargo, los críticos llevan años argumentando que esta tecnología podría utilizarse para prolongar la vida útil de la industria de los combustibles fósiles, perjudicando así el clima en lugar de protegerlo.

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La captura de CO₂ ya está permitida en Alemania, pero la legislación vigente ha imposibilitado la puesta en marcha de proyectos de almacenamiento y limita considerablemente el transporte a gran escala.

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