Esta semana la rentabilidad del bono americano a 30 años ha vuelto a subir a niveles cerca del 5%, empujando rentabilidades de bonos europeos a máximos de los últimos cinco años. El bono a 30 años alemán rozó el 3.4%, el bono británico tanteó niveles del 5.7% y el bono español subió, pero se quedó por debajo del máximo de los últimos cinco al 4.28%. Incluso el bono nipón, que apenas ha tomado un descanso en su ascenso desde diciembre del 2021, ha escalado a nuevos máximos del 3.28% esta semana. Estos niveles de tipos de interés altos a largo plazo vuelven a reflejar incertidumbres sobre el crecimiento económico y miedos inflacionistas.
El sector eléctrico europeo es sensible a tipos de interés altos
Está siendo una semana difícil para los valores eléctricos europeos. Esta volatilidad refleja el miedo de los inversores a un escenario de tipos de interés altos por mucho tiempo y sus consecuencias para el sector eléctrico. El impacto negativo para el sector se vería reflejado en costes de financiación a largo plazo más altos en las cuentas de las empresas.
Un hipotético escenario de tipos mas altos por un periodo de tiempo más largo acabaría convirtiéndose en un coste de capital mayor, entendido como la media ponderada entre el coste de la deuda y la rentabilidad esperada por los accionistas. En este caso, el precio de la acción debería ser el espejo de menor un valor actualizado de los flujos de caja futuros de la empresa, descontados a un coste de capital mayor.









Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios