El análisis de los nuevos datos del gobierno muestra que las emisiones chinas de CO2 han vuelto a los niveles anteriores al coronavirus, al aumentar un 4-5% interanual en el pasado mes de mayo.
Las emisiones cayeron aproximadamente un 25% en las seis semanas posteriores al confinamiento, desde principios de febrero hasta mediados de marzo, antes de tocar fondo, ya que las fábricas y las centrales eléctricas redujeron la producción y el tráfico por carretera y aéreo también disminuyó sustancialmente
Pero los últimos datos muestran que el repunte de las emisiones ha sido rápido, como lo demuestra el retorno de la contaminación del aire a los niveles anteriores a la crisis.
El aumento de CO2 en mayo fue impulsado por la energía del carbón, el cemento y otras industrias pesadas, que parecen estar recuperándose más rápido que otros sectores de la economía. Esto está generando preocupaciones sobre las implicaciones globales de una recuperación de carbón en China.
Sin embargo, los últimos datos muestran que las emisiones chinas de CO2 en 2020 hasta la fecha permanecen un 6% por debajo de los niveles de 2019. Dado que China perdió su objetivo de PIB por primera vez en 30 años, pero también dejó de lado los objetivos ‘verdes’, la evolución de las emisiones en este año sigue siendo una interrogante.
Tras una caída sin precedentes del 25% en las emisiones chinas de CO2 durante el bloqueo del coronavirus, siempre fue probable un rebote. Y los últimos datos oficiales muestran que el repunte ha sido rápido, con el aumento de las emisiones chinas de CO2 en un 4-5% interanual en mayo, tal como se refleja en el gráfico anterior.
Los principales impulsores del aumento general de las emisiones de CO2 en mayo fueron los aumentos del 9% en la generación de energía térmica y en la producción de cemento. La energía térmica (principalmente de carbón) se ha recuperado mucho más rápido que la demanda total debido a las débiles instalaciones de energía no fósil desde el verano pasado y las malas condiciones de operación de la energía hidroeléctrica este año.
La generación de energía nuclear aumentó en un 14%, la eólica en un 5% y la solar en un 7% interanual en mayo, pero esto fue insuficiente para compensar la caída del 17% en la energía hidroeléctrica.
Más allá del sector eléctrico, la producción de cemento también aumentó drásticamente en mayo, aunque todavía se mantiene baja, lo que significa que gran parte del crecimiento en abril y mayo corresponde a la recuperación tras el confinamiento.
Si bien las emisiones de CO2 de China aumentaron en mayo, el total para 2020 hasta la fecha se mantiene por debajo de los niveles del año pasado y las perspectivas para el resto del año son inciertas.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios