Los coches eléctricos reducirán la demanda de combustible a casi la mitad para 2040

La demanda mundial de petróleo alcanzará un nuevo récord este año, con más de 102 millones de barriles consumidos cada día, casi la mitad de ellos por vehículos.

Hasta ahora, la creciente flota de coches, furgonetas, camiones y autobuses eléctricos sólo ha desplazado una pequeña parte de la demanda: 1,5 millones de barriles de petróleo al día en 2022. Pero las baterías están en marcha, y BloombergNEF predice que el pico de demanda de combustible no está tan lejos: llegará en 2027.

"La combinación de vehículos eléctricos, eficiencia de combustible y movilidad compartida está reduciendo la demanda de combustibles de carretera", afirma David Doherty, responsable de investigación sobre petróleo y combustibles renovables de BNEF. "Este descenso se agrava a partir de 2030".

El consumo de petróleo desplazado por los vehículos eléctricos se elevará a más de 20 millones de barriles al día en 2040, según el escenario de transición económica de BNEF, que modela una transición energética dirigida por el mercado que no asume cambios políticos. Es más petróleo del que consumió EEUU el año pasado.

La demanda de combustibles de carretera alcanza un máximo de 49 millones de barriles diarios en 2027. "A partir de entonces, la demanda empieza a descender de forma estructural, hasta alcanzar los 35 millones de barriles diarios en 2040", afirma BNEF en su último informe.

Es probable que la demanda de gasolina y gasóleo para el transporte por carretera ya haya aumentado al máximo en EEUU y Europa, mientras que la demanda en China alcanzará su punto máximo en 2024. En otros grandes países consumidores, como la India, la demanda empezará a disminuir más tarde, en la década de 2030.

Las intervenciones del mercado podrían alterar sustancialmente la velocidad de esta transición. Un aumento del precio del petróleo, por ejemplo, hace que los vehículos eléctricos sean mucho más competitivos que los de combustión convencional, y los precios acaban de alcanzar su nivel más alto del año.

La presión concertada de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP)para elevar el precio del crudo está teniendo consecuencias que quizá no le gustarían.

Mientras tanto, las empresas petroleras y gasistas se preparan para un mundo que requerirá menores volúmenes de su producto. La puntuación otorgada por BNEF a las grandes petroleras en función de su preparación para un mundo que aspire a emisiones netas cero muestra que los europeos van en cabeza, con la noruega Equinor en el puesto más alto en 2023, seguida de BP.