Se mantiene el estancamiento. Durante el mes de abril las matriculaciones de turismos y todoterrenos registraron un retroceso del 12,1% comparado con el mismo mes del 2021 lo que implica haber vendido 69.111 unidades. En el acumulado del año, las 233.509 unidades que se han vendido suponen una caída del 11,8% respecto al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, como lleva ocurriendo en los últimos meses hay una manera de ver el vaso medio lleno en lugar de medio vacío: poner la vista sobre los vehículos electrificados.
Durante el cuarto mes del año este tipo de vehículos consiguieron crecer nada menos que un 35,4% frente al 2021 lo que implica haber vendido 6.608 unidades. Montante que supone un 8% del mercado en dicho mes mientras que en el acumulado del año las 25.706 unidades representan una de cada 10 ventas en nuestro país. Por su parte, las matriculaciones de vehículos electrificados, híbridos y de gas (turismos, cuadriciclos, vehículos comerciales e industriales y autobuses) aumentan sus ventas en abril en un 8,9% con respecto al mismo mes del año anterior, hasta las 27.702 unidades entregadas. En el acumulado del año, las entregas de estos vehículos crecen en un 17,7% hasta las 97.776 unidades.
Gracias a estos datos, este tipo de vehículos se posicionan como la segunda opción más demandada gracias al 34,3% de cuota registrado durante el mes de abril, 3,5 puntos menos que los gasolina (37,8%) y 6,5 puntos más que los diésel (27,8%). En números, esas 27.702 unidades se han quedado a tan solo 2.837 matriculaciones de los modelos de gasolina mientras que han superado en 5.266 unidades a los de gasóleo. De esta forma las emisiones medias de CO2 de los turismos vendidos en el mes de abril se quedan en 121,8 g/km recorrido, un 4.4% menor que la media de emisiones de los turismos nuevos vendidos en abril de 2021.
Los eléctricos siguen al alza
Yendo por categorías fueron los híbridos enchufables los modelos que más crecieron durante el mes de abril con nada menos que un 42,6% frente al 2021 lo que implica haber sumado 4.391 ventas. En el acumulado ya rozan las 15.000 lo que implica igualmente el crecer un 46,1% frente al mismo periodo del año pasado. Su cuota total se sitúa en un 5,37%. Tras ellos, los eléctricos puros se situaron con una mejora del 23% durante el mes de abril al vender 2.217 unidades mientras que en el acumulado ya están en 10.747 unidades lo que supone un crecimiento del 84,7% frente al ejercicio anterior a estas alturas, representando ya un 3,86% del mercado total. Si nos centramos en los turismos, este segmento aumenta un 33,2% su participación, hasta las 1.925 unidades.
Ahora bien, el peso de los electrificados en nuestro país sigue siendo para los híbridos y es que pese a crecer tan solo un 4,9% durante abril (19.604 unidades matriculadas) en el acumulado del año ya alcanzan las 67.171 unidades, un 10,3% más que en 2021 representando una cuota total del 24,13%, es decir, que uno de cada cuatro modelos que se venden en España es un híbrido.
Margen de mejora
De todos modos, aunque el mercado tiene una tendencia positiva y ascendente, desde ANFAC se alerta que para lograr alcanzar el objetivo de un parque de 3 millones de turismos electrificados para 2030 marcados en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, el ritmo actual es insuficiente. En los cuatro primeros meses, se han matriculado 23.957 turismos electrificados (BEV+PHEV), si se mantiene este ritmo se cerraría el año con cerca de 72.000 unidades vendidas, muy lejos de las 120.000 unidades marcadas como hito en 2022 para alcanzar el objetivo planteado por el PNIEC en 2030.
José López-Tafall, director general de ANFAC, señaló que “el sector sigue empujando con una amplia oferta de vehículos, pero es muy necesario generar un contexto de mayor certidumbre al usuario mediante el impulso de las infraestructuras de recarga, una mayor eficiencia de los planes de ayuda y un marco fiscal favorable que haga del vehículo electrificado una primera opción de compra”. Por su parte, la directora de comunicación de GANVAM, Tania Puche, afirma que “además de impulsar la electrificación, hacen falta políticas mucho más activas y eficaces de achatarramiento, sobre todo, orientadas a estos vehículos de mayor antigüedad”.
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