La visita del actual CEO confirma que tanto la marca alemana como su planta de Rüsselheim tienen un papel crucial en la estrategia de conglomerado, destacando además la velocidad en la que sus instalaciones han ganado en eficiencia
Stellantis está viviendo un momento convulso (como el resto del sector del automóvil), más tras la salida del ya exCEO Carlos Tavares de manera casi clandestina y con nocturnidad (el anuncio se produjo un domingo a la noche). El reemplazo no se hizo esperar y las riendas las ha tomado John Elkann quien parece ha empezado ya a empaparse de lo que supone estar en uno de los conglomerados más grandes del panorama actual. Su primera parada no ha sido al azar ya que el empresario italo-americano de 48 años ha visitado la factoría de Opel en Rüsselsheim.
No ha ido solo sino que ha estado acompañado de Xavier Chéreau, presidente del Consejo de Supervisión de Opel con el objetivo de reafirmar su apoyo y compromiso para el futuro a largo plazo tanto de la marca como de la factoría. Junto con Florian Huettl, CEO de Opel y Director General de Stellantis Alemania, visitaron uno de los centros neurálgicos de la firma alemana, donde actualmente se fabrica el Astra (prueba) en todas sus variantes de propulsión y al que hace poco se le unió el DS4 (prueba). También recibieron una visión de la futura cartera de modelos de Opel en el Centro de Diseño. Además, se tomaron el tiempo necesario para hablar con los empleados y los interlocutores sociales.
Adaptados rápidamente
Durante la visita a la Adam Opel Haus, Elkann y Chéreau también recibieron información actualizada sobre el progreso del proyecto grEEn-campus, la futura sede de Stellantis Alemania y la nueva sede mundial de Opel en Mainzer Straße en Rüsselsheim. La nueva sede de la empresa, moderna, eficiente y urbana, contribuirá de manera decisiva a reducir la huella de carbono de la sede de Rüsselsheim.
"Opel y Alemania son muy importantes para Stellantis. En un momento de profunda transformación industrial, me complace aprovechar la oportunidad de esta visita a Rüsselsheim para reafirmar nuestro compromiso con las operaciones alemanas de Stellantis y con nuestro diálogo de alta calidad con nuestros socios y partes interesadas clave, en particular IG Metall. Este enfoque cooperativo brindará oportunidades sostenibles para todos en Alemania, un primer ejemplo de lo cual es la construcción del campus grEEn en Rüsselsheim", dijo el presidente de Stellantis, John Elkann.
Por su parte, el propio Chéreau aseguró que “la velocidad con la que nuestras plantas alemanas se han transformado en centros de producción eficientes y de última generación es impresionante. Por supuesto, no debemos cejar en el aumento continuo de nuestra competitividad y calidad en la producción y el servicio al cliente. Me gustaría dar las gracias a IG Metall y a nuestro comité de empresa por su constructiva y confiada colaboración".
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