No falla. Europa vive un deja vú con Rusia y Ucrania. Seis años después, otra vez, Europa depende de que se arreglen, que la tensión baje para poder lograr un suministro de gas suficiente para sobrellevar el invierno. Pero ahora, la situación es más grave por dos motivos. Uno, porque Europa tiene en mínimos sus reservas de gas, y dos, porque el precio se ha situado en máximos antes de la llegada del invierno.
La tensión es máxima en el mercado. Se podría decir que han entrado en pánico, en shock, con valores totalmente desorbitados, sobre todo en los mercados eléctricos de futuros en el Viejo Continente.
Gran parte de cculpa la tiene lo que sucede en los mercados de gas. El precio ha superado su máximo histórico. Por ejemplo, el TTF holandés, el mercado de referencia en Europa, ha fijado el precio a final de sesión por encima de los 117 €/MWh tras subir en una sola jornada cerca de un 11%.
La curva lo dice todo. Hace un año el precio estaba en unos 20 €/MWh. Se ha sextuplicado.
Alemania está tensando la cuerda con Rusia. Mientras no abandone su posición contra Ucrania no habrá gasoducto Nord Stream 2. El nuevo gobierno de Scholz le ha tirado el balón al tejado de Putin. Ahora el presidente ruso tiene que mover pieza. Pero cuanto más se extienda esta crisis diplomática, más pánico entrará en los mercados energéticos europeos.
Y Europa está sin gas. No se puede permitir este 'juego' prebélico que afecta de lleno a los intereses económicos europeos y por qué no decirlo, a la vida de muchos ciudadanos que podrían quedarse sin suministro de gas para calentarse este invierno.
Además, esta tensión también está afectando al mercado de CO2 que se sitúa por encima de los 80 euros por tonelada.
Todo ello hace que los precios futuros de la electricidad se estén disparando en toda Europa hasta nuevos máximos históricos. Para la semana de Navidad en Francia ya se cotiza a más de 400 €/MWh. Para enero y febrero ya también se están fijando precios en ese orden. Para todo 2022 el precio se ha ido más allá de los 230 €/MWh, cuando en este 2021 lo ha hecho en 100 €/MWh.
En el caso de Alemania tres cuartas partes de lo mismo. Enero y febrero se iría hasta los 300 €/MWh de media y el CAL22 se sitúa ya por encima de los 205 €/MWh.
En España más de lo mismo. Enero y febrero muy cerca de los 300 €/MWh y para todo el año se fija ya el precio a 204,49 €/MWh.
Estos precios serían inaguantables. Llevarían a Europa a su mayor crisis energética, y probablemente a tener que parar la demanda para intentar bajar los precios. O eso, o que se arreglen de una vez Rusia y Ucrania.
AG
14/12/2021