La marca de automóviles sueca Polestar ha presentado su estrategia para los próximos tres años, con una previsión de crecimiento en sus ventas minoristas de entre el 30% y 35% entre 2025 y 2027.
Desde la marca han realizado un plan de negocios actualizado y confían en mejorar sus ventas en el futuro, tras encadenar pérdidas en los últimos años, confiando en los datos del final de 2024 en el que aumentó un 37,2% la recepción de nuevos pedidos con respecto a 2023.
"Estamos acelerando nuestra expansión minorista y transformación comercial, al mismo tiempo que ajustamos nuestra futura línea de modelos y reducimos significativamente nuestra base de costos. Tanto en términos de volúmenes como de finanzas, esperamos que 2025 sea el año más sólido en la historia de Polestar", argumentaba el consejero delegado, Michael Lohscheller.
En diciembre, Polestar obtuvo más de 800 millones de dólares en créditos a 12 meses de varios bancos, y está buscando otro por más de 400 millones. Desde la marca sueca esperan tener un flujo de efectivo libre a partir de 2027.
La empresa, junto con su matriz Geely Holding Group, ha mantenido conversaciones constructivas con los inversores, que siguen apoyándola, según ha destacado en un comunicado.
Además, la firma ha señalado que en 2025 comenzará a comercializar el nuevo Polestar 7, un SUV compacto premium que se fabricará íntegramente en Europa, al tiempo que planea durante los próximos tres años expandirse en el mercado europeo y de América del Norte a través de más espacios comerciales.
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