Este martes PSOE y Unidas Podemos han firmado un preacuerdo para intentar formar un gobierno de coalición para la próxima legislatura. Las dos formaciones han dado mucha importancia, o al menos en sus programas y declaraciones, a la política energética y a la lucha contra el cambio climático; lo que en la izquierda han querido denominar transición ecológica en vez de energética con el objetivo de darle mayor importancia al calentamiento global del planeta y sus efectos aunque sin perder de vista la política energética.
Tanto el PSOE como Unidas Podemos han querido reflejarlo en el documento inicial de preacuerdo en el que destacan 10 puntos de lo que pretenden hacer para a próxima legislatura, pero a grandes rangos.
En dicho documento hablaban de lucha contra el cambio climático y transición ecológica justa. Y en otro punto miraban por un plan de reindustrialización.
De momento se desconoce el programa, los compromisos o el plan de acción del Gobierno (si finalmente sale adelante) para los próximos cuatro años, pero si se mira en detalle los programas electorales de PSOE y Unidas Podemos pueden encontrarse bastantes cosas en común, pero también significativos distanciamientos.
Yéndonos un año atrás, por estas fechas pero de 2018 Sánchez e Iglesias firmaron un pacto para sacar adelante los presupuestos de 2019. En el programa publicaron 15 medidas que llevarían a cabo en materia de política energética y acción climática.
Entre esas medidas ya pactadas hace un año está por ejemplo acabar con los windfall profit de nuclear e hidroeléctrica estableciendo un límite del precio que puedan percibir en el mercado eléctrico. También está reducir el porcentaje que representa término de potencia; que el término variable de la componente regulada sea incremental en función de la energía consumida, de forma que el coste a pagar por las personas consumidoras por los primeros kWh sea inferior a los siguientes, incentivando la eficiencia energética.
https://elperiodicodelaenergia.com/sanchez-e-iglesias-ponen-patas-arriba-el-sector-energetico-en-el-acuerdo-de-pge-2019-las-15-medidas-pactadas/
También estaban de acuerdo en poner en marcha un Plan Estatal para la Rehabilitación de Viviendas, con una duración de cuatro años y con una movilización de 400 millones cada año. Sacar adelante una Estrategia Nacional contra la Pobreza Energética, algo en lo que ya ha trabajado el Gobierno socialista en este último año, mejorar las subastas de renovables o dar ayudas a la movilidad eléctrica.
En esto parecen estar de acuerdo, aunque hay más cosas teniendo en cuenta los últimos programas electorales para el 10N. Ambas formaciones apuestan porque la transición ecológica será justa o porque los coches dejen los combustibles fósiles para 2040. También están de acuerdo en castigar fiscalmente al que contamina o trabajar en un plan que revitalice la industria. También quieren desarrollar baterías para coches eléctricos en España y revisar los pagos por capacidad.
Pero más allá de esto, también existen varias diferencias entre uno y otro partido. Por ejemplo, Unidas Podemos quiere atacar directamente al oligopolio eléctrico. Una palabra, la de oligopolio, que ni se menciona por parte del PSOE. La formación que dirige Pablo Iglesias quiere crear una empresa pública de energía, algo impensable para el PSOE. En UP apuestan por cerrar las nucleares a más tardar en 2024 cuando en el PSOE ya se ha pactado un cierre nuclear hasta 2036. Para las centrales térmicas de carbón UP apuesta por cerrarlas en 2025 mientras que el PSOE, según el PNIEC podrían estar hasta 2030, aunque el mercado parece que acabará con estas plantas previsiblemente antes.
En cuanto al objetivo de renovables, ambos quieren alcanzar el 100% de renovables, pero en UP son más ambiciosos y lo quieren hacer para 2040 mientras que en el PSOE miran más para 2050. En UP siguen recordando que hay que hacer una auditoría de costes mientras que en el PSOE esa medida ha pasado ya a buen término. Algo parecido sucede por ejemplo con las centrales hidráulicas. En UP quieren recuperar automáticamente la gestión pública de las centrales mientras que en el PSOE no se llegan a mojar tanto en este aspecto.
En el PSOE hablan más de dotar al medio ambiente de mayor presencia en la Constitución, aprobar su trilogía de Ley de Cambio Climático, PNIEC y Estrategia de Transición Justa. Ambos quieren reformar el mercado eléctrico, pero el camino es bien distinto. Mientras que el PSOE apuesta por dar mayor entrada a las renovables, en UP creen que las renovables deben marcar el precio fijado en el mercado.
En el PSOE hablan de Green New Deal y seguir los pasos de la UE, mientras que en UP ese término ni se menciona. Es más del equipo de Equo que se fue con Errejón.
El caso es que tanto PSOE como UP tienen trabajo por delante en materia de transición energética. En algunas cosas parecen estar bastante de acuerdo, pero en otras están en las antípodas. ¿Cómo quedará finalmente?
Miguel
13/11/2019