La subasta de la interrumpibilidad celebrada la semana pasada por Red Eléctrica ha resultado un descalabro para las empresas pero un éxito para los consumidores: la operación ha permitido contratar los 2.000 MW necesarios para este servicio por un coste de 352 millones, es decir, 200 millones menos de los 550 millones que costará este año el mismo servicio.
El varapalo sufrido por algunas de las grandes empresas puede tener unas consecuencias desastrosa. Este es el caso del fabricante de aluminio Alcoa, que ha confirmado que tiene que estudiar la viabilidad de sus plantas de Avilés y A Coruña tras no haber conseguido precios competitivos en la subasta de interrumpibilidad, ya que el impacto es mayor en estas dos fábricas que disponen de una tecnología menos moderna y eficiente.
Según los resultados de la subasta dados a conocer por el operadordel sistema eléctrico, Red Eléctrica ha realizado adjudicaciones a un total de 113 compañías, de las 139 plantas industriales que participaban, lo que supone el 80% del total. Únicamente 26 plantas no han conseguido colocar ninguno de sus bloques y tendrán que esperar a que el Ministerio de Industria, previo informe de la CNMC, decida realizar una subasta extraordinaria, según informa el diario El Economista.
Red Eléctrica ha cubierto 810 MW con la adjudicación de 9 bloques de 90 MW a un precio medio de 295.000 euros, que estaban destinados principalmente a los grandes industriales. El resto, los 1.190 MW restantes se han cubierto con bloques de 5 MW a un precio medio de 95.000 euros, lo que supone un coste total de 352 millones de euros.
Este hecho supone dejar un coste medio para la interrumpibilidad de 175.000 euros. Este mismo servicio supuso un desembolso de 650 millones de euros en 2013, y supondrá unos 550 millones este año, después de que el Gobierno haya puesto fin al incesante coste de este servicio. A estas cantidades hay que añadirles el coste de este servicio de gestión de la demanda en los sistemas insulares de Canarias y Baleares, que supondrán un coste total de 10 millones de euros para un total de 16 proveedores: 8 en Gran Canarias, 4 en Tenerife, 3 en Lanzarote-Fuerteventura y 1 en Mallorca, lo que supone un total de 60 MW.
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