La asociación de fabricantes europeos que haga frente a las marcas chinas en materia de coches eléctricos parece que va cobrando forma. Si bien parece que el plan de Luca de Meo, CEO de Renault, pasa porque las diferentes marcas de renombre del Viejo Continente se unan para crear coches eléctricos más baratos, la realidad es que no hay nada como ser tú mismo el que dé el primer paso. Y es que según apuntan desde Automotive News Europe, de Meo habría empezado a entablar conversaciones con Volkswagen para la fabricación conjunta de un coche eléctrico de reducidas dimensiones.

No hace falta ser demasiado inteligente para pensar en el futuro Twingo E-TECH, modelo que acompañaría al recientemente presentado Renault 5 E-TECH y al más que posible Renault 4 E-TECH, en lo que vendría a ser un auténtico remember de los modelos más icónicos de la historia de la marca francesa.

Renault da la base

Si bien el propio Luca De Meo aseguró bajo el marco del Salón de Ginebra que “está abierto a cualquier tipo de negociación”, la realidad es que el primer acercamiento con Volkswagen parece haberse ya dado a tenor de lo que confirmó en la muestra suiza. El objetivo sería que el nuevo modelo de Renault compartiese plataforma con los eléctricos de Volkswagen más pequeños, lo que descarta por completo al futuro ID.2 que ya tiene su base completamente definida, y nos haría hablar de un futurible ID.1.

Un tipo de unión que vendría de perlas al grupo Volkswagen ya que la firma alemana parece que se está quedando atrás frente a otros conglomerados como puede ser Stellantis, que ya ha confirmado una nueva hornada de modelos basados en plataformas más económicas y con precios mucho más asequibles, los mismos que ya han dado el pistoletazo de salida con el nuevo Citroën ëC3 2024. El director ejecutivo de la marca VW, Thomas Schaefer, ha confirmado que está abierto a colaboraciones mientras que el propio De Meo ha sido tajante asegurando que seguirá adelante con el proyecto con o sin socio pues “no tengo tiempo que perder”.

Reducción de costes

En este sentido, sería Renault la que cedería la plataforma del Twingo para dar forma al que sería el sucesor del e-Up!, un vehículo que solo estuvo en el mercado unos meses para compensar emisiones de la marca y que tras un intento de vuelta su producción acabó por finalizar. El objetivo de la marca francesa es reducir los costes de fabricación del futuro Twingo en casi un 40% lo que le permitiría ofrecerlo por un precio inferior a los 20.000 euros (sin ayudas gubernamentales). Para conseguirlo se reducirá el tiempo de fabricación, se cambiará la forma de comercializarlo e incluso el tipo de elementos que forman su sistema motriz, como es el caso de las baterías LFP (litio ferrofosfato), sin obviar que serán coches más sencillos en lo que se refiere a número de piezas.