El PP ha pedido en el Pleno del Congreso a la vicepresidenta para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, que dimita por el disparado precio de la electricidad y esta ha respondido que, si de este indicador dependiera la viabilidad de un Gobierno, tendrían que dimitir todos los gobiernos de la Unión Europea, la propia Comisión y también el Parlamento Europeo.
Y es que tras exigirle el diputado ‘popular’ Guillermo Mariscal responsabilidades y acusarle de incumplir la promesa lanzada por el presidente del Gobierno Pedro Sánchez de que el precio no rebasaría en promedio el alcanzado en 2018, la vicepresidenta le ha invitado a comparar los precios en el resto de mercados europeos.
“Se llevará una enorme sorpresa”, ha incidido Ribera, asegurando que al ‘pool’ energético español no le afecta de la misma manera el encarecimiento del gas procedente de Rusia ni contar con un tercio del parque nuclear parado.
“La diferencia es que cuando vienen mal dadas las cosas no aplicamos el ‘sálvese quien pueda’, ya sea en la Atención Primaria o en energía”, ha dicho Ribera, aludiendo a las dificultades de atención en los ambulatorios de la Comunidad de Madrid en la nueva ola de la pandemia de Covid-19, y criticando medidas aplicadas por anteriores gobiernos del PP para atajar problemas en el sistema eléctrico.
En este sentido, ha criticado que en el pasado se acusara de especuladores a pequeños inversores fotovoltaicos, la aplicación del conocido ‘impuesto al Sol’, se impidiera el cierre de “centrales obsoletas y fuera de la legalidad”, en referencia a las térmicas, o no se apostara tanto por las energías renovables.
“No podemos intervenir en cada tarifa ni en el consumo de cada familia, pero sí apostar por una reducción fiscal y de los cargos sin precedentes”, ha abundado Ribera, que ha finalizado lamentando no haber contado con el apoyo del PP en ninguna de las medidas de apoyo a los consumidores. “Ni en este campo ni en ningún otro hemos contado con su apoyo, ¡nunca!”, ha enfatizado, elevando el tono.
“HA FRACASADO, NO MIENTA MÁS”
En su intervención, Guillermo Mariscal ha criticado que la vicepresidenta “erró en su diagnóstico” y que el resultado es “la factura más cara de la historia”: “Ha fracasado, no mienta más. La culpa siempre es de otro y la responsabilidad nunca es suya”, ha apostillado el responsable de Energía del PP.
Asimismo, ha señalado que la Comisión Europea ha advertido por carta al Gobierno que adoptan medidas “en la dirección contraria”, en referencia al recorte de ingresos de las eléctricas y ha puesto en duda la magnitud de la rebaja fiscal, ya que la recaudación sigue siendo mayor a la de años anteriores.
“Han recaudado más que nunca, ¿dónde está ese esfuerzo fiscal?”, le ha preguntado Mariscal, invitando al Gobierno a ahondar más aún en la rebaja del IVA aplicado a la factura –del 21% está en el 10% y el PP exige llevarlo al súperreducido del 4%–, llevar a Presupuestos el resto de costes fijos y utilizar los ingresos de las subastas de derechos de emisión de CO2 para abaratar el coste final de la energía.
Finalmente, dada la negativa de Ribera a dimitir por el precio actual de la electricidad, le ha preguntado qué nivel tiene que alcanzar, siguiendo los parámetros que utilizaban PSOE y Unidas Podemos cuando estaban en la oposición, para que se decida a abandonar el Ejecutivo.
1 comentario
Dice el refranero español que mal de muchos consuelo de tontos. Pues tiene razón que deberían de dimitir la mayoria de los ministros europeos de energía, pues ha sido un error grave de estrategia y planificación energética. Así que cunda con el ejemplo y presente su dimisión.
Polonia, que ha sido de los más díscolos con la actual política energética en Europa, es de los pocos que se salvan con un precio bastante estable de la electricidad sobre los 100€ el MWh, y lo ha hecho quemando carbón. No se unió al fervor de cerrar las centrales de carbón durante el año pasado. Quienes lo hicieron ahora sufren las consecuencias.
Algunos ministros les ha podido el ansia de querer aparentar ser muy verdes y han cerrado precipitadamente las centrales de carbón pasando a depender en exclusiva del gas. Ahora estos países son meros títeres con sus economías en serio peligro.