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Esta última sensación, personal y silenciosa, de sacar pecho, es la que han experimentado las empresas locales distribuidoras de energía eléctrica tras el paso la borrasca Filomena por encima de sus instalaciones, soportes, cables y protecciones. En España hay 333 empresas distribuidoras de energía eléctrica, pero las empresas locales citadas, en su conjunto no superamos los 500.000 clientes o el 5% de los suministros del país. Muchas de ellas pertenecemos a ASEME, la Asociación de Empresas Eléctricas y queremos agradecer la labor de nuestros equipos, ya que gracias a ellos hemos podido mantener el servicio eléctrico sin ninguna incidencia durante la borrasca Filomena.

La distribución de energía eléctrica tiene siempre un reto permanente con la meteorología. A diferencia de otros negocios, con sus activos bajo techo, en el caso eléctrico se diferencia por tener la mayoría de las instalaciones a cielo abierto, sufriendo el frio del invierno y el calor del verano, así como las peligrosas combinaciones de ambos con viento, lluvia y nieve. Las situaciones meteorológicas extremas, cada vez más habituales, suponen un examen periódico para red y por tanto, de su resiliencia. Siempre se puede mejorar. Nunca hay un “excelente” para la red. No se admite ni se tolera el fallo.

La distribución de energía eléctrica, en especial en las zonas rurales, tiene este plus de dificultad que no lo tiene el ámbito urbano. Dar calidad eléctrica de nivel urbano en las zonas rurales es complejo y es una tarea que solo las empresas locales de distribución de energía son capaces de llevar a cabo. La implicación de su personal, comprometido con la empresa y el territorio, combinado con la inversión continuada en la red por parte de las compañías para garantizar la seguridad y calidad del suministro, son factores clave que han permitido estos días, a los miembros y responsables de estas empresas, sacar pecho ante este singular y poderoso rival que es la meteorología, cuando se ha conseguido mantener la calidad de servicio durante el Filomena sin ninguna incidencia. Por eso, sirva este artículo para felicitar a las empresas de ASEME y a sus equipos, porque en esta etapa de noticias tristes y desalentadoras, David ha vencido a Goliat.

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2 comentarios

  • Francisco

    24/01/2021

    Mi enhorabuena, y una sugerencia "malvada": A ver si algún responsable público o privado, envía algunos de esos grupos técnicos a la cañada real y esas personas pueden volver a tener suministro eléctrico de una buena vez.
  • Carlos

    10/02/2021

    Hablar en esos términos de la cañada real es no saber qué está pasando. Hay un consumo no superior al habitual, sino muy muy muy excesivo, provocado por los que cultivan marihuana.
    Protestar por que no tengan luz a la compañía eléctrica, en este caso UFD, es hacerle el juego a los traficantes

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