No habrá transición energética si no es justa. Estas palabras no son mías. Probablemente las hayan leído en algún programa energético de Unidas Podemos, o incluso del propio PSOE. Y esa es la razón de ser del que probablemente, salvo susto de última hora en el hemiciclo, será el nuevo Gobierno de coalición entre ambas formaciones.
Transición energética, sí, pero justa. Ya lo han avanzado en varias ocasiones tanto desde el Ministerio para la Transición Energética, donde ya trabajan a destajo en la Estrategia Nacional de Transición Justa, y en su socio Unidas Podemos. Pero, ¿se conseguirá esa transición justa? Ojalá, pero en los términos siguientes: transición justa para todos, no solo para los afectados del carbón. También para los afectados de las industrias que consumen grandes cantidades de energía, para todos los consumidores a los que no hay que cargar con más cosas innecesarias, para los ciudadanos a los que cargar con más impuestos,... Si ha leído esto último le habrá chocado. Es imposible hacerlo de esta manera.
La principal fuente de financiación de la Estrategia de Transición Justa procede de los Presupuestos Generales del Estado, y sin unos nuevos PGE no habrá transición energética justa que valga. Eso sí, pagada por todos. Lo que no está tan claro es que sea una transición justa para todos y solo lo sea para unos pocos. Está por ver. Lo que sí debe tener seguro es que usted, querido/a lector/a, se tendrá que rascar el bolsillo.
El candidato a presidente del Gobierno, y presidente en funciones, Pedro Sánchez, dijo en su discurso de investidura que va a poner en marcha un Instituto de Transición Justa para ayudar a las comunidades afectadas por el cierre de la cuencas mineras y centrales nucleares. ¿Otro instituto? ¿De verdad es necesario? ¿Para qué está entonces el IDAE? ¿O el Instituto para la Reestructuración de la Minería del Carbón y Desarrollo Alternativo de las Comarcas Mineras?
El problema no es el Instituto, el problema es si este Gobierno sale adelante, será con minoría, y necesitado de más apoyos para sacar adelante los PGE de 2020. Sin PGE, repito, no habrá ni Instituto ni transición justa, y está previsto que en junio de este año cierren varias centrales térmicas.
¿Se imaginan el cierre de estas centrales sin nuevos PGE? Algo se hará, pero no desde el Ministerio, sino por las empresas que han decidido cerrar su negocio ruinoso del carbón. Tanto Endesa como Iberdrola y Naturgy ya tienen planes para tratar de hacer más llevadero el cambio. Pero ya les auguro yo una primavera calentita si no se consiguen los apoyos necesarios para sacar adelante los PGE.
Sánchez también ha indicado que se aprobará un plan integrado de Energía y Clima, con el que se reformará el mercado de electricidad con el fin de reducir la factura "siempre dando certidumbre a inversores antiguos y futuros, no como ocurrió con anteriores administraciones". Que se lo digan a los miles de afectados de la fotovoltaica. Un PNIEC que debería estar ya en Bruselas y que el Gobierno debería haber presentado ya en sociedad y es siete de enero y no se sabe nada todavía. ¿Habrá que esperar a un nuevo tirón de orejas de Bruselas? ¿O estará previsto sacarlo a bombo y platillo cuando se formalice el nuevo Ejecutivo?
"Cualquier acción tendrá como prioridad la transición justa en el nuevo modelo energético. No puede quedar nadie atrás ni haber perdedores", ha apostillado Sánchez. Asimismo, ha comprometido una reforma del bono social eléctrico para crear un "bono general" que incluya el consumidor de gas natural y la prohibición de los cortes de suministro básico "cuando el impago se deba a motivos ajenos a la voluntad de los titulares". ¿Cómo se pagará todo esto?
Durante su intervención, Sánchez ha comprometido un Plan de Desarrollo Industrial con el fin de aumentar el peso de este sector en el PIB, la mejora de la competitividad y la creación de empleo de calidad. "Vamos a luchar decididamente contra las deslocalizaciones", ha subrayado, asegurando que su Ejecutivo "activará los recursos del Estado para garantizar la continuidad de aquellas empresas que sean fuente fundamental de empleo en sus comarcas".
¿A qué se referirá con eso? Los recursos del Estado significan más ayudas. Acaba de asestar un hachazo al mecanismo de interrumpibilidad que ha dejado tiritando al sector porque Bruselas le ha dicho que así no. Entonces, activará los recursos del Estado que le deje Bruselas hacer, no los que pueda pretender. Se deberían decir las cosas más claras.
Este lunes Sánchez, Iglesias y Ribera se juegan mucho. Y tienen poco tiempo para sacar adelante los necesarios PGE y tratar de llevar a cabo lo que ellos llaman transición energética justa. Porque si no, ya me dirán ustedes, queridos lectores, cómo se paga todo esto. Y si se consigue, luz y taquígrafos, no lo digo yo, lo reivindican desde hace años el PSOE y Unidas Podemos.
Dabama
07/01/2020