Se cumplen 35 años del primer aerogenerador marino de la historia: Svante 1
Esta es la historia de Svante 1, inaugurado el 1 de septiembre de 1990 en Nogersund (Suecia), el aerogenerador que tiene el honor de ser el primero offshore de la historia
La eólica marina acaba de cumplir 35 años. El 1 de septiembre de 1990, en la localidad costera de Nogersund (Suecia), se inauguraba Svante 1, el primer aerogenerador offshore del mundo, marcando el inicio de una industria que entonces pocos podían imaginar.
A finales de los años 80 apenas había 1 GW de energía eólica instalada en todo el mundo, toda ella en tierra firme. Fue entonces cuando alguien en Suecia tuvo la visión de mirar hacia el mar. El mar Báltico ofrecía condiciones de viento favorables y mucho espacio abierto, y surgió entonces la pregunta que impulsó este proyecto: ¿sería posible instalar y operar un aerogenerador en el mar?
Así nació Svante 1, un proyecto de demostración tecnológica promovido por Sydkraft (hoy parte de E.ON), con el objetivo de probar la viabilidad técnica de la eólica marina. Nadie imaginaba entonces que, tres décadas después, esta tecnología se convertiría en una de las grandes apuestas globales para descarbonizar la generación eléctrica.
Hoy, con gigavatios instalados en alta mar, aerogeneradores que superan los 15 MW de potencia y proyectos que se extienden por todo el mundo, la eólica offshore es una pieza clave de la transición energética.
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Un proyecto pionero
El desarrollo de Svante 1 tenía un doble propósito muy claro:
Por un lado, demostrar la viabilidad técnica de instalar un aerogenerador en el mar, incluyendo aspectos clave como la cimentación, la resistencia a la corrosión, el mantenimiento en entorno marino o la conexión eléctrica en condiciones reales.
Por otro, el proyecto buscaba evaluar su impacto ambiental, observando posibles efectos arrecife, interacción con la pesca, y los niveles de ruido submarino.
El emplazamiento elegido fue Nogersund, en la región de Blekinge (Suecia), una zona con aguas poco profundas (tan solo 7 metros) y condiciones de viento favorables. Esta ubicación permitía reducir al mínimo la complejidad técnica en una industria que, por entonces, apenas comenzaba a dar sus primeros pasos.
Trabajos con el aerogenerador durante su instalación.DigitaltMuseum. CC BY 4.0.
Los números del proyecto, eran coherentes con el estado del arte de la tecnología de entonces: una sola turbina de 220 kW de potencia, instalada a solo 250 metros de la costa. Hoy en día, los parques eólicos marinos equipan decenas o incluso cientos de turbinas de 15 MW ubicadas a decenas de kilómetros mar adentro y en aguas mucho más profundas (hasta alrededor de 80 metros aproximadamente).
Detrás del proyecto estaba la eléctrica Sydkraft AB (hoy E.ON Sverige), por entonces la segunda mayor compañía energética de Suecia. No se trataba de un parque comercial, sino de un prototipo piloto con fines de investigación y demostración, financiado con fondos propios de la compañía y con el apoyo de programas públicos de I+D del gobierno sueco a finales de los años 80.
Marinmuseum. V115365. DigitaltMuseum. CC BY 4.0.
Construcción y cimentación
Como se puede ver en las fotos, su cimentación fue de tipo trípode (tripile), una solución que ya no se utiliza hoy en día en eólica offshore. La estructura incluía una parte de hormigón visible en forma de pilotes (columnas) y zapatas cuadradas, sobre la que se montó la estructura metálica superior que sostenía la torre del aerogenerador.
Todo el proceso se llevó a cabo en lo que parece haber sido un dique seco, utilizando técnicas procedentes de la construcción naval. Una vez finalizado el montaje, la zona se inundó de forma controlada.
Así eran los cimientos de Sventa 1.Marinmuseum. V115351. DigitaltMuseum. CC BY 4.0.
Aunque no los hemos podido confirmar, todo apunta a que la estructura fue diseñada para flotar inicialmente, ser remolcada hasta el punto de instalación, y posteriormente lastrada para quedar firmemente asentada en el lecho marino.
Como se aprecia tanto en la imagen superior como en la inferior, la inauguración de Svante 1 fue todo un acontecimiento para la localidad de Nogersund, congregando a numerosos vecinos, autoridades locales y representantes del sector energético.
Lo que nadie imaginaba entonces es que, con el paso del tiempo y gracias a su proximidad al núcleo urbano, aquel modesto aerogenerador experimental acabaría convirtiéndose en un símbolo para la comunidad, representando tanto el espíritu pionero del lugar como su vinculación temprana con las energías renovables.
Así fue la inauguración.Marinmuseum. V115351. DigitaltMuseum. CC BY 4.0.
Desmantelamiento: el final de un símbolo pionero
Svante 1 operó durante 15 años, hasta que en 2005 una avería en el generador obligó a su propietario, E.ON Sverige (antigua Sydkraft), a iniciar los planes de desmantelamiento.
La decisión no pasó desapercibida en la comunidad local. Durante meses, vecinos y asociaciones trataron de evitar que se retirara la turbina, apelando a su valor histórico y simbólico como primer aerogenerador offshore del mundo y emblema de Nogersund. Incluso se propuso que la empresa municipal asumiera la gestión de la turbina, y E.ON llegó a ofrecer los 143.000 euros que costaría desmantelarla como parte del traspaso.
Aunque las negociaciones avanzaron considerablemente, todo se vio frustrado por un obstáculo legal clave: la autorización marítima que permitía la existencia de la instalación caducaba el 31 de diciembre de 2006. Sin una renovación, la estructura pasaría a considerarse ilegal desde el punto de vista normativo.
Finalmente, la Corte Medioambiental de Växjö dictaminó que Svante 1 debía ser completamente desmantelado antes del 31 de diciembre de 2007 ( se concedió una extensión de un año). La resolución también exigía la restauración total del fondo marino, lo que selló definitivamente el destino del aerogenerador.
El proyecto, que muchos querían conservar como monumento o pieza histórica, fue completamente retirado entre 2007 y 2008, cerrando un capítulo que había marcado el nacimiento de la eólica marina moderna.
Para entonces, el sector había dado un salto espectacular: de un único aerogenerador en aguas suecas en 1990, se había pasado a más de 1 GW instalado en todo el mundo. Hoy en día, la cifra supera los 70 GW, y Svante 1 sigue siendo recordado como la semilla de una industria global que continúa creciendo.
Cimentación: Tripile de acero, anclado a 7 metros de profundidad
Propietario: Sydkraft (hoy E.ON Sverige)
Puesta en marcha: Septiembre de 1990
Producción media anual: ~400 MWh (equivalente al consumo de ~100 viviendas suecas en aquella época)
El aerogenerador en una imagen aérea.Fuente | Marinas.com
Sobre el fabricante Wind World
Wind World fue un fabricante danés de aerogeneradores fundado en 1985 en Skive (Jutlandia). Durante los años 80 y 90 se centró en turbinas de 200 a 600 kW, ampliamente utilizadas en Dinamarca, Alemania y Suecia.
Desarrolló modelos como el WW 15/55 (55 kW, rotor de 15 m) y el W5200/750 (750 kW, rotor de 52 m), similar en tamaño a las V52 de Vestas y G52 de Gamesa.
En 1998 fue adquirida por NEG Micon, fruto de la fusión entre NEG y Micon, y en 2004 pasó a formar parte de Vestas, contribuyendo al crecimiento del que sería el líder mundial del sector.
Un artículo de Sergio Fernandez Munguía, autor de Windletter. Puedes suscribirte a Windletter aquí.
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