Toyota sí sabe ser eléctrica y presenta el nuevo C-HR+

Mucho se le ha criticado a Toyota el hecho de haber tardado tanto en introducirse de pleno en la total electrificación. Una estrategia que para nada es tabú en la firma japonesa pero que no es para nada prioritaria, como se ha demostrado hasta ahora. De hecho, desde las altas esferas se ha buscado la diversificación de tecnologías como pueda ser, en este caso, el hidrógeno, todo ello sin dejar de lado, lógicamente, la hibridación. Pero las nuevas normas de emisiones medioambientales impuestas en la Unión Europea han obligado a todos los fabricantes a acelerar sus estrategias electrificadas y por ello Toyota ha escogido este momento para presentar el modelo que será uno de sus puntales: el CH-R+ que llegará al mercado en la segunda parte del año.

No te dejes engañar por el nombre pues aunque adquiere las siglas del afamado SUV compacto de la firma, que en este 2025 ya se ha colocado como la apuesta electrificada de su categoría destacando sobre todo la incidencia que está teniendo en la categoría de los phev, la realidad es que Toyota solo ha escogido el nombre para engrosar las que serán sus futuras ventas. Decimos esto porque en realidad no se basa en la misma plataforma que da al modelo actual, sino que utiliza la e-TNGA 2.0 que da vida al bZ4X.

Un diseño estilizado

Ahora bien, a diferencia del que fue el primer eléctrico de la historia de la marca, cuyo diseño ha sido desde el inicio criticado (más aún tras ver los Subaru Solterra y Lexus RZ), en el caso del C-HR+ se observan unas líneas más elegantes y fluidas, que estilizan su figura y en el que se observan zonas específicas como la afilada calandra o los grupos ópticos delanteros, mientras que los traseros aquí sí recuerdan a los del bZ4X. Ahora bien lo que no ha perdido es su apariencia de corte coupé con una pronunciada caída del tehco que, eso sí, no merma la habitabilidad trasera.

No en vano, de los 4,52 metros que mide de largo este nuevo C-HR+, 2,75 metros se han destinado a su distancia entre ejes, brindándole un espacio para las piernas amplio en las plazas posteriores. La cota de altura no ha sido desvelada pero confirman que está a la altura de las expectativas. Al igual que el maletero, cuya capacidad asciende a los 416 litros. El puesto de conducción no cambia prácticamente nada y ofrece un aspecto de calidad, con un diseño más próximo al del bZ4x y con una fuerte carga digitalizada.

Motores conocidos

En lo que respecta al rendimiento mecánico, Toyota ha tirado de economía de ahorro y le ha dotado casi de las mismas opciones que el bZ4X de nueva factura. Esto se traduce en una primera opción que estará asociada a una batería de 57,7 kWh de capacidad bruta y que alimentará un único motor de 165 CV que dará tracción a las ruedas delanteras y con el que se espera pueda llegar a recorrer hasta 455 km con una sola carga.

Por encima se situará una alternativa de tracción total que suma un segundo motor en el eje trasero para desarrollar conjuntamente 343 CV y conseguir un 0 a 100 km/h de solo 5,2 segundos. En este caso la capacidad de la batería también se incrementa hasta los 77 kWh, homologando 525 km. Ahora bien, Toyota ampliará progresivamente la gama con la llegada de la que será la versión fetiche y más racional, la de un solo motor y batería de 77 kWh con la que poder llegar a homologar hasta 600 km con una sola carga. En cuanto a la potencia de carga, en corriente alterna podrá admitir conexiones hasta de 22 kW, mientras que en continua, la potencia se sitúa en 150 kW. Además, en lo que a fiabilidad se refiere, la marca nipona asegura que mantendrá su densidad energética por encima del 70% incluso tras haber circulado durante 10 años o 1 millón de kilómetros, confirmando una garantía total de 8 años o 160.000 km, lo que antes se s cumpla.

En lo que a dinámico de conducción, Toyota confirma que este nuevo C-HR+ propondrá una mejor experiencia al volante gracias a la mayor rigidez que aporta la plataforma combinado en este caso con la puesta a punto específica en la que se han retocado tanto las barras estabilizadoras como la dirección o los amortiguadores, al tiempo que el centro de gravedad se ha reducido.

El bZ4X también se renueva

De manera paralela, el bZ4X, pionero en lo que a coche eléctrico se refiere dentro de la marca japonesa y que no ha cosechado los éxitos esperados, también presenta alguna que otra novedad que va enfocada a ponerle en la misma onda de su recién presentado hermano C-HR+. En este sentido, las opciones mecánicas se incrementan con la llegada de la alternativa de un único motor de 165 CV con tracción delantera y batería de 57,7 kWh, homologando en este caso 445 km. Adicionalmente se han anunciado otras dos versiones más asociadas a la batería de 73,1 kWh como son una de 221 CV capaz de recorrer 573 km y otra con tracción total, con 338 CV y una autonomía estimada de 520 km (323 millas). Quizás lo más impresionante es que esta versión necesita tan solo 5,1 segundos para alcanzar los 100 km/h.

Asimismo, Toyota ha implementado mejoras en los motores eléctricos, que ahora incluyen semiconductores de carburo de silicio, al tiempo que se ha optimizado el proceso de carga gracias al aumento de la densidad energética de ambos paquetes y al mayor número de celdas utilizadas en cada uno. De esta forma, las novedades se centran en la inclusión de un sistema de preacondicionamiento de la batería con el que se optimiza la carga a alta velocidad y se reduce el tiempo. Así, cuando se conecte a una estación de 150 kW en CC, el tiempo para pasar del 10 al 80% se queda en 30 minutos, mientras que en alterna se ha aumentado a los 22 kW, siendo opcional su elección ya que de serie parte con 11 kW.

Por último, se han realizado pocos cambios en su diseño, por fuera se han establecido algunos pequeños retoques para mejorar la aerodinámica del frontal. Por su parte, el habitáculo recibe ligeras pinceladas como es la inclusión de un nuevo cuadro de instrumentos digital más sencillo o una nueva pantalla de 14 pulgadas que elimina los interruptores de climatización independientes del modelo anterior.