Renovables

Un estudio del Instituto de Defensa alemán advierte contra las turbinas eólicas chinas

El informe encargado por el gobierno afirma que Pekín podría cerrar parques eólicos de forma remota

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El sistema político y la cohesión social de Alemania podrían verse amenazados si se instalan turbinas chinas en el país, según un informe de las autoridades del país. Según un informe encargado por el ministro de Defensa alemán, Pekín podría retrasar deliberadamente proyectos, recopilar datos sensibles y apagar turbinas de forma remota si se le diera acceso a parques eólicos.

La china Mingyang entra en el mercado eólico offshore europeo con el suministro de la turbina más potente del mundo para un parque en Alemania
El acuerdo cubre el suministro de 16 turbinas eólicas marinas de Ming Yang con una capacidad de hasta 18,5 MW cada una para su instalación en 2028.

El informe señala que deben utilizarse todas las vías legales para impedir la construcción del parque eólico Waterkant frente a la costa de Borkum, en el noroeste de Alemania, que la gestora de activos Luxcara, con sede en Hamburgo, adjudicó a MingYang Smart Energy para suministrar 16 turbinas.

Luxcara ha rechazado las afirmaciones de los círculos militares de que la granja podría suponer un peligro para la seguridad nacional. "Nos tomamos muy en serio las discusiones sobre los posibles riesgos de las tecnologías no europeas y somos conscientes de nuestra responsabilidad", dijo una portavoz al diario económico Handelsblatt.

Añadió que se están tomando precauciones de seguridad muy específicas para la tecnología informática instalada. Además, el fabricante, MingYang, no tendrá acceso directo a los controles del sistema durante el funcionamiento, según la empresa. El control, la gestión, las conexiones de datos y el servicio técnico se realizarán en Alemania.

Un elemento desestabilizador

“En caso de utilizar sistemas o componentes de fabricantes chinos… dada la situación política, se puede incluso suponer que tal desaceleración o incluso interrupción sería utilizada deliberadamente por China como medio de presión política o incluso como instrumento de guerra económica”, afirma el informe, preparado el mes pasado por el grupo de expertos Instituto Alemán de Defensa y Estudios Estratégicos.

“No se puede descartar, por tanto, una desestabilización tanto del sistema político como del modelo de negocio de la industria alemana y de la cohesión social debido a la falta o insuficiente seguridad de planificación en el sector energético”, añadió.

La UE ha comenzado a “tomar medidas enérgicas” contra los proveedores de energía eólica chinos después de sospechar que reciben subsidios estatales para vencer a los competidores europeos en proyectos de la UE, según informan varios diarios de información alemanes. De hecho, el año pasado, la Comisión Europea, el órgano ejecutivo de la UE, comenzó a investigar proyectos eólicos vinculados a Pekín en Bulgaria, Francia, Grecia, Rumania y España.

Andrea Scassola, vicepresidente de investigación eólica en la consultora Rystad, dijo: “Lo que estamos viendo… es una intensificación de la rivalidad entre las grandes potencias, y en un momento en que nuestro mundo está más interconectado que nunca, es un amplificador de la vulnerabilidad y los riesgos”.

La dependencia excesiva de China también aumenta el riesgo de ciberataques que podrían “conducir al cierre de la producción”, añadió Scassola.

El informe hace una advertencia similar: Pekín podría retrasar la operación de nuevos parques “al menos cuatro o cinco años” entre las etapas de aprobación de la planificación y puesta en servicio, y podría coordinar otros esfuerzos disruptivos con Rusia.

Los proveedores chinos también tendrían acceso a programas informáticos que controlan turbinas activas y recogen datos de cientos de radares integrados en los parques eólicos, afirma el informe, que conjetura que este acceso otorgaría a China “un considerable potencial de chantaje en el futuro”.

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2 comentarios

  • Leo

    Leo

    04/03/2025

    Si la guerra de aranceles con EEUU es inevitable y nos gastamos lo que no tenemos en defensa, no parece buena idea boicotear la industria renovable china. China nos puede hacer menos vulnerables energéticamente y puede paliar los problemas arancelarios al comercio creados por Trump. Los aranceles a sus coches eléctricos tampoco fueron una buena idea.
  • Víctor

    Víctor

    04/03/2025

    El problema no es que las turbinas sean chinas, sino que la red de control esté conectada sin cortafuegos ni VPN a Internet.
    Y no sólo con turbinas chinas, pasa parecido con los cazas que se compren a USA, con los coches de Tesla, o con los proveedores de la nube AWS, Azure: pueden desactivarlos remotamente.

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