La firma automovilística Volkswagen ha producido este miércoles el último e-Golf en su fábrica de Dresden (Alemania), por lo que estas instalaciones se prepararán para comenzar a ensamblar el nuevo ID.3 a finales del mes de enero.
Según informa la compañía alemana, desde 2017 se han fabricado allí un total de 50.401 unidades del Golf totalmente eléctrico, que dejará de producirse por la llegada del ID.3, un modelo desarrollado desde el principio para ser 'cero emisiones'.
"El final del e-Golf es también el comienzo de los preparativos finales para el ID.3. En solo unas semanas, abriremos el próximo capítulo de la factoría. Después de Zwickau (Alemania), somos la segunda planta en Europa en fabricar vehículos basados en la nueva plataforma modular eléctrica (MEB) del grupo", ha reivindicado el director de la planta Transparent Factory de Dresden, Danny Auerswald.
Por su parte, el presidente del comité de empresa de la factoría, Thomas Aehlig, ha subrayado que la llegada del ID.3 es una "muy buena noticia" para la plantilla y es la recompensa por los "muchos esfuerzos" realizados en la transformación de las instalaciones desde 2016.
Después de iniciar los primeros preparativos para la llegada del ID.3 el pasado verano, ahora la planta se preparará para comenzar la producción de este modelo a partir de finales de enero.
Lanzado en 2014, el e-Golf fue fabricado en Wolfsburd hasta el verano de 2020. Fue en 2017 cuando Dresden comenzó el ensamblaje de este vehículo en paralelo para satisfacer la gran demanda. En total se construyeron 145.561 unidades en ambas plantas, de las cuales 50.401 fueron en Dresden.
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