Volvo XC90 2025: eternamente joven

Es poco habitual que un modelo se dilate tanto a la hora de presentar sus actualizaciones. El timing habitual es que tras presentar el coche pasen cuatro o cinco años para mostrar su renovación y, de ahí, otros lustro aproximado para ver la nueva entrega. Pero en el caso del XC90 de Volvo la historia está siendo bien distinta porque el todocamino de siete plazas lleva en el mercado desde hace nueve años, lo que da buena muestra de que cuando se hacen las cosas bien, pocas cosas hay que cambiar. Pero esta situación no se podía seguir dilatando más y por eso ahora la firma sueca, que acaba de reajustar su estrategia eléctrica de cara al 2030, acaba de presentarnos el XC90 2025 que aquí te desgranamos.

Pinceladas estéticas

Como ves, el XC90 2025 mantiene su grandiosidad, determinada por unas dimensiones que el convierte en el SUV más grande de la firma: 4,95 metros de largo, 1,92 metros de ancho y 1,77 metros de alto. Cotas que no varían frente al modelo que conocíamos pero que ahora se presentan bajo una estética más moderna en la que destaca la calandra frontal completamente inédita compuesta por lamas oblicuas que se entrelazan justo en el medio, donde se coloca el logo.

Flanqueándola, están los nuevos grupos ópticos que estilizan su figura y dan mayor protagonismo a uno de los pocos elementos que no cambia de esta zona delantera: el martillo de Thor de las luces LED diurnas. El resto del XC90 2025 propone cambios menos aparentes, centrados en los paragolpes, la nueva firma lumínica de los pilotos traseros (que siguen siendo verticales) o los nuevos juegos de llantas cuyo tamaño va de las 19 a las 22 pulgadas. Del mismo modo, la paleta de colores estrena nuevas tonalidades.

En el interior se mantiene la disposición conocida, con la pantalla central vertical de 11,2 pulgadas a la que se suma otro monitor de 12,3 pulgadas para el cuadro de instrumentos del que Volvo no anuncia cambios y seguirá siendo minimalista. En cambio, el sistema multimedia sí cambia de software hacia uno más avanzado y rápido, basado en el sistema operativo Android Automotive.

Por lo demás, la firma sueca asegura haber aumentado la ya de por sí excelente calidad percibida, con materiales de corte noble, al tiempo que ha incrementado el aislamiento acústico. En lo que respecta a las capacidades, se mantiene la configuración de siete asientos, con una tercera fila amplia para adultos, al que se suma un maletero con un volumen generoso: desde 640 litros para las cinco plazas y desde los 212 litros con todos los asientos desplegados dependiendo dela versión.

Motores electrificados

El aspecto mecánico es el único en el que Volvo no ha realizado cambios sobre el XC90 2025 ya que estrenó bloques hace relativamente poco. De esta forma y para esta actualización se mantienen las versiones electrificadas, que parten del B5 con tecnología de 48 voltios y etiqueta ECO, entregando 250 CV y 350 Nm, asociada a una caja de cambios automática de ocho relaciones y a la tracción total.

Por encima se situará el XC90 2025 T8, o lo que es lo mismo, el híbrido enchufable que combina el mismo bloque de gasolina de cuatro cilindros y 2.0 litros, al que se suma otro eléctrico para rendir de manera conjunta 455 CV y 709 Nm de par. En este caso, además, se podrá mover en modo 100% eléctrico durante un máximo homologado de 70 kilómetros gracias a la energía acumulada en la batería de 18,8 kWh brutos, de los cuales 14,4 kWh son útiles. Según Volvo, esta versión supera los 800 km de recorrido.

Blindado

Como es obvio, hablar de Volvo es hacerlo de seguridad y en este caso el buque insignia no iba a ser menos. De hecho, con esta actualización, el SUV de siete plazas se postula como uno de los mejores en este aspecto gracias al uso de radares y cámaras que permiten ofrecer sistemas como el nuevo recentrado en el carril, especialmente útil cuando detecta que te has desviado de manera involuntaria al carril de al lado o hacia la cuenta. Además, es capaz de emplear el freno para evitar colisiones frente a peatones, ciclistas o animales.

En unión con la dinámica de conducción, Volvo también ha mejorado la suspensión de serie. Ahora, cada amortiguador individual puede adaptarse mecánicamente a las condiciones de la carretera para optimizar tanto el confort como la estabilidad. Opcionalmente, se puede elegir una suspensión neumática junto con un chasis activo que supervisa al vehículo, la carretera y el conductor 500 veces por segundo.

Reducción de costes en los eléctricos

Además de haber modificado su estrategia eléctrica, en cierto modo provocada por los aranceles a los coches eléctricos chinos o hechos en china, como es el caso del EX30 (contacto), la firma sueca ha ampliado su colaboración con el fabricante de chips estadounidense Nvidia confirmando que utilizará un único sistema de software respaldado por los semiconductores de la norteamericana para la fabricación de los futuros modelos de vehículos eléctricos con el ánimo de reducir los costes de producción.

Así, a partir del lanzamiento del EX90, el fabricante tendrá una única pila tecnológica para todos los modelos y el sistema de software del EX90 estará respaldado por el chip Drive Orin de Nvidia, capaz de realizar más de 250 billones de operaciones por segundo y que será sustituido a finales de esta década por un chip capaz de realizar 1.000 billones de operaciones por segundo, afirma. Con una eficiencia energética siete veces mayor, la integración del sistema Nvidia Drive Thor que llegará a lo largo de la década, también ayudará al grupo a preparar la próxima generación de automóviles que podrán integrar funciones de seguridad y asistencia a la conducción más avanzadas.