La capital holandesa de Ámsterdam se ha comprometido a prohibir todos los automóviles y motocicletas de gasolina y diésel a partir de 2030 como parte de un plan para mejorar la calidad del aire de la ciudad.
El plan comenzará el próximo año con una prohibición de los automóviles diésel mayores de 15 años, ya que la ciudad trabaja para mejorar su terrible historial en cuanto a la calidad del aire, que se ha ganado a pesar del amor que sienten los holandeses por las bicicletas.
El plan de "Acción de aire limpio" de la ciudad prohibirá que los autobuses y autocares con motor de combustión interna (ICE) ingresen al centro de la ciudad desde 2022, seguido de una prohibición de las embarcaciones de recreo de gasolina o diesel, así como de las motos y ciclomotores desde 2025.
"La contaminación es un asesino silencioso y uno de los mayores riesgos para la salud en Ámsterdam", dijo Sharon Dijksma, concejal responsable de las áreas de tráfico, transporte, agua y calidad del aire de la ciudad.
Al igual que muchas otras ciudades europeas, Ámsterdam ya tiene una "Zona de bajas emisiones" (LEZ) que restringe el movimiento de furgonetas y camiones diésel, autobuses y autocares, y ciclomotores de alta emisión en el centro de la ciudad.
En octubre de 2018, Dijksma dijo en una conferencia sobre vehículos eléctricos en Japón que los EV jugarían un papel clave para alcanzar el objetivo de la ciudad de convertirse en un líder en emisiones cero. "Mi misión es convertir a Ámsterdam en la principal capital mundial de emisiones cero para 2025 y el transporte eléctrico es una de las respuestas a este desafío", dijo.
Pero existe la preocupación de que la demanda de vehículos eléctricos ya supera la oferta, un hecho que fue reconocido por Dijksma en la conferencia de Japón.
Si bien la ciudad dice que alentará a sus residentes a hacer el cambio a los vehículos eléctricos al ofrecer un punto de recarga gratuito para los conductores que compran vehículos eléctricos, el grupo de presión de la industria automotriz holandesa, Rai Association, expresó su preocupación por la disponibilidad y asequibilidad de los vehículos eléctricos por parte de los residentes de la ciudad. “Muchas de las decenas de miles de familias que no tienen dinero para un automóvil eléctrico pronto se quedarán afuera en el frío. Eso hace que Ámsterdam sea una ciudad los ricos ", dijo un portavoz de la asociación.
“Esperamos que, en 2030, aproximadamente un tercio de los autos serán eléctricos, pero también habrá mucha gente que no podrá permitirse eso para entonces ".
Según la organización de transporte austriaca VCÖ , los Países Bajos tienen la segunda mayor participación de mercado de vehículos eléctricos de Europa, con ventas de automóviles eléctricos enchufables que representan el 5,4% de todas las ventas de vehículos en 2018.
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