Política energética  ·  Eléctricas

Australia elabora una norma para reducir el riesgo de cortes de electricidad causados por condiciones meteorológicas adversas

La capacidad de recuperación de la red de distribución se reconocerá ahora explícitamente en las normas nacionales sobre electricidad, estableciendo un marco formal

Ningún comentario

La Comisión Australiana del Mercado de la Energía (AEMC) ha elaborado una norma final más preferente para ayudar a que la red eléctrica sea más resistente a los fenómenos meteorológicos extremos.

Las tormentas, las inundaciones y los incendios forestales son cada vez más frecuentes e intensos, lo que añade más tensión a la red de distribución eléctrica y deja a millones de hogares y empresas expuestos a cortes de electricidad.

Estabilidad y retos emergentes en el sector energético
El cambio climático es otro riesgo crítico que afecta al sector energético, con fenómenos extremos como incendios forestales que interrumpen operaciones y dañan infraestructuras clave.

La norma final responde a una petición de la ministra de Energía y Recursos de Victoria, Lily D'Ambrosio, después de que varios fenómenos meteorológicos graves dejaran sin electricidad a cientos de miles de personas, en algunos casos durante varias semanas.

Nuevo marco

Dado que se espera que el cambio climático agrave aún más estos fenómenos, la capacidad de recuperación de la red de distribución se reconocerá ahora explícitamente en las normas nacionales sobre electricidad, estableciendo un marco formal que incluye:

  • Nuevos factores de gasto en resiliencia que los proveedores de servicios de redes de distribución (DNSP) y el regulador australiano de la energía (AER) deben tener en cuenta a la hora de desarrollar y evaluar las propuestas de gasto

  • El requisito de que la AER elabore, publique y mantenga unas directrices formales de resistencia de la red

El mundo ha sufrido 15 grandes apagones en los últimos 5 años, la mayoría por fallos técnicos
Desde fallas técnicas hasta eventos climáticos extremos, pasando por ataques físicos y problemas estructurales, los cortes de energía han dejado al descubierto la alta vulnerabilidad de las redes eléctricas globales.
  • Nuevos requisitos anuales de planificación y presentación de informes para mejorar la transparencia y la rendición de cuentas de la actuación de los DNSP, y los resultados para los consumidores, en caso de fenómenos meteorológicos graves.

Mayor claridad normativa

La mayor claridad normativa ayuda a los DNSP a planificar eficazmente en caso de condiciones meteorológicas extremas y a invertir en medidas que reduzcan el riesgo de cortes de electricidad al tiempo que ayudan a los clientes necesitados.

Esto podría incluir inversiones de adaptación para reforzar postes y cables en comunidades de alto riesgo, reubicar infraestructuras en zonas propensas a inundaciones, o aumentar el número de generadores móviles y subestaciones que pueden mantener las luces encendidas cuando se interrumpe el suministro eléctrico.

Además, los DNSP pueden proponer gastos de resiliencia en programas para gestionar los riesgos de incendios forestales e inundaciones.

La presidenta de la AEMC, Anna Collyer, ha declarado que la norma final se ha elaborado teniendo en cuenta los intereses a largo plazo de los consumidores. “Sólo este año, cientos de miles de australianos han sufrido cortes de electricidad debido a condiciones meteorológicas extremas”.

“El impacto puede ser muy perturbador, especialmente para los clientes vulnerables y las comunidades menos resistentes a los fenómenos meteorológicos extremos. El nuevo marco apoya resultados más equitativos, al tiempo que mejora la transparencia y la rendición de cuentas del gasto en resiliencia que beneficia a todos los consumidores”, añadió Collyer.

Gastos de resiliencia

A partir del 2 de octubre de 2025, los DNSP de Victoria pueden incluir factores de gasto de resiliencia en sus propuestas regulatorias revisadas, que la AER debe tener en cuenta en sus determinaciones finales para el período de control regulatorio 2026-31. Las normas transitorias exigirán que

  • La AER desarrolle y publique sus Directrices formales de Resiliencia de la Red antes del 1 de diciembre de 2026

  • Los PSDN deban cumplir los nuevos requisitos de planificación e información anuales a partir de sus Informes Anuales de Planificación de la Distribución (IPAD) de 2028.

La norma final forma parte de un programa de trabajo más amplio diseñado para reducir los impactos del cambio climático en la red energética, lo que incluye las dos revisiones del panel de expertos del Gobierno de Victoria sobre la resiliencia de la red y la comunidad y el establecimiento por parte de la AER de un Valor de Resiliencia de la Red.

Noticias relacionadas

No hay comentarios

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios

Este sitio web está protegido por reCAPTCHA y la Política de privacidad y Términos de servicio de Google aplican.