No es la primera vez que hablamos sobre el efecto del invierno en los coches eléctricos y más concretamente sobre la merma en la autonomía. Otro reciente análisis realizado por la consultora Recurren ha revelado que ante temperaturas de 0º centígrados la pérdida de rango media experimentada es un 20% aproximadamente. La muestra no es para nada escasa pues han medido cerca de 18.000 unidades correspondientes a 20 modelos cero emisiones que se comercializan en Estados Unidos.
La muestra concluye resultados cuanto menos sorprendentes con un claro destacado: Tesla. No en vano la firma californiana ha copado el podio de este análisis con un Model X como referente, pues solo perdió un 11% de la autonomía. Justo por detrás se situó el Model S, con un 12% de pérdida, y el Model 3 (prueba), tercero con un 13% menos de rango empatado con el Audi e-tron (prueba del RS). El top 5 lo cierra, no obstante, otro Tesla, en este caso el Model Y (prueba), que mantuvo un 86% de la capacidad de la batería. En el lado opuesto, el frío parece que no le sentó nada bien a modelos como el Volkswagen ID.4 (prueba) que redujo su autonomía en un 36%, el Chevrolet Equinox, que perdió un 26% y el Cadillac Lyriq, el peor del análisis con solo el 72% de la capacidad de la batería.
Mantiene la temperatura
El frío no es el mejor aliado para los eléctricos.
Más allá de la relevancia que puedan tener estos resultados y la preocupación de algunas marcas ante ellos, lo realmente importante es que 11 de los 13 modelos cero emisiones que mejor rendimiento propusieron en condiciones de frío extremo estaban equipados con bombas de calor, mientras que siete de los nueve peores carecían de ellas.
La bomba de calor es un elemento relativamente nuevo y, sobre todo, desconocido para el público general, que ha empezado a tomar conciencia de ellos con la llegada de los eléctricos. Está directamente relacionada con el confort climático y el rendimiento de la batería, preservando lo máximo posible la autonomía final. Y es que el funcionamiento óptimo de este tipo de coches se consigue en una temperatura media, ni excesivamente alta (donde aparece una mayor degradación de las celdas) ni tampoco muy baja.
Hoy por hoy son cada vez más los modelos que las incorporan de serie aunque otros en caso de que no sea así, siempre se pueden incluir de manera opcional, por un precio que ronda los 1.000 euros, asegurando así un nivel de autonomía más realista cuando conectamos el climatizador, pues gracias a ella se consume mucha menos electricidad que otras tecnologías diseñadas para realizar un trabajo similar.
De hecho, en el estudio de Recurrent se concluyó que los modelos equipados con bomba de calor mantuvieron de media un 83% de la autonomía en estas condiciones de frío extremo, frente al 75% que se conservó de media en las que no lo equipaban. Del mismo modo, se observó que las baterías de litio ferro-fosfato (LFP) retuvieron más autonomía que las de NCA.
¿Qué es una bomba de calor?
Diagrama de un sistema eléctrico con bomba de calor de un coche. Audi
La definición más clara y directa sobre este elemento es un componente que se integra en el sistema de climatización de los coches eléctricos, destacando por su alta eficiencia energética. Sin embargo, no solo sirve para climatizar el habitáculo del vehículo, ya sea con aire acondicionado o calefacción, sino que tiene una incidencia directa en la temperatura de las propias baterías.
La tecnología que utiliza una bomba de calor está basada en la termodinámica: transporta energía en forma de calor a través de distintos ambientes y utiliza un proceso que tiene que ver con el cambio de estado de líquido a gas del fluido refrigerante del vehículo. Para ello, se sirve de un compresor, un evaporador y un condensador, además del propio circuito de refrigeración y el líquido refrigerante. Así, el sistema obtiene el calor del habitáculo y de los sistemas eléctricos del vehículo y lo transforma en más calor o en frío en función de lo que seleccione el conductor. Manteniendo además la batería del vehículo a una temperatura adecuada.
Una bomba de calor puede generar más calor empleando menos electricidad que otro sistema alternativo, como resistencias eléctricas o sistemas de combustión interna. Así, la energía térmica proporcionada por una bomba de calor es muy superior a la cantidad de energía eléctrica consumida para hacerla funcionar. Es por ello por lo que se puede afirmar con rotundidad que este sistema es muy eficiente en lo que a energía se refiere.
Importante la instalacion de bombas de calor en los coches electricos.
Una informacion a tener en cuenta, a la hora de comprarse un coche electrico.
Buen articulo.
galan
06/02/2025
Todos los datos tecnicos que da el articulo son importantes.
Pero, para mi el mas importante es, que la energía térmica proporcionada por una bomba de calor es muy superior a la cantidad de energía eléctrica consumida para hacerla funcionar.
Poco a poco, como tecnología disruptiva, se ira imponiendo.
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galan
06/02/2025