Brasil necesita invertir más de 6 billones de dólares en energía hasta 2050 para alcanzar el cero neto

Brasil necesita intensificar rápidamente sus esfuerzos de descarbonización para convertirse en una economía de cero emisiones netas para 2050, según New Energy Outlook: Brazil , publicado por BloombergNEF (BNEF). El informe se basa en los resultados del New Energy Outlook 2024, el producto estrella de BNEF, y examina la trayectoria de descarbonización de Brasil utilizando modelos ascendentes en los sectores de energía, transporte, industria y construcción hasta 2050.

El informe se basa en los últimos escenarios energéticos y climáticos de BNEF para analizar las emisiones relacionadas con la energía de Brasil, que representan la mitad de las emisiones totales del país; la agricultura (excluido el uso de la tierra), el cambio de uso de la tierra y la silvicultura contribuyen a la mitad restante. Dentro del sector energético de Brasil, el transporte representa el 53% de las emisiones, seguido de la industria con el 25%, la electricidad y la energía combinadas con el 11% y los edificios con el 6%.

Según el Escenario Net Zero (NZS) de BNEF, que traza un camino hacia emisiones netas cero a nivel mundial para 2050, la inversión necesaria para que el país alcance el objetivo de cero emisiones netas es de 6 billones de dólares entre hoy y mediados de siglo. Sin embargo, esta cifra es solo un 8% superior al gasto requerido según el Escenario de Transición Económica (ETS) de BNEF, que describe cómo evoluciona el sector energético como resultado de cambios tecnológicos basados ​​en costos y supone que no se realizan intervenciones políticas adicionales. Dos tercios de la inversión del NZS se destinan a la demanda de energía, en particular a las ventas de vehículos eléctricos.

La electrificación, el motor principal

El futuro de Brasil con emisiones netas cero requiere una variedad de tecnologías diferentes, siendo la electrificación el principal motor de los esfuerzos del país por descarbonizarse. A partir de 2040, la electrificación se convierte en la principal fuerza impulsora de la reducción de emisiones, principalmente en la descarbonización del transporte por carretera, los edificios y la industria. La electrificación por sí sola es responsable del 55% de las reducciones de emisiones entre ahora y 2050, en comparación con un escenario de "sin transición" en el que la descarbonización y la eficiencia energética permanecen estancadas.

Otras vías clave para alcanzar las emisiones netas cero son la captura y el almacenamiento de carbono (CCS), el hidrógeno y la bioenergía, que juntos representan el 27% de las reducciones de emisiones, principalmente en los sectores de uso final. El transporte representa más de la mitad de la demanda de hidrógeno en 2050. El transporte marítimo y la aviación combinados alcanzan 2,3 millones de toneladas métricas de demanda de hidrógeno en Brasil en 2050, aunque la categoría de más rápido crecimiento es la del hidrógeno como agente de craqueo para producir combustibles de aviación sostenibles de base biológica.

A pesar de los avances logrados hasta la fecha por Brasil en la descarbonización de la energía, en el marco del ETS, la energía limpia aún representa el 38% de las reducciones de emisiones entre hoy y 2050. Priorizar la implementación de tecnologías maduras, como la eólica y la solar, sigue siendo una opción política "sin remordimientos" en el corto plazo, desde una perspectiva económica.

Vinicius Nunes, autor principal del informe, afirmó: “Brasil tiene una matriz eléctrica limpia, lo que coloca al país en una buena posición para descarbonizar su economía mediante la electrificación. Sin embargo, la mitad del uso final de energía en la actualidad todavía proviene de combustibles fósiles. Algunos sectores difíciles de reducir, como la aviación y el acero, requieren soluciones diferentes y, por eso, no se puede alcanzar el cero neto en Brasil sin bioenergía, hidrógeno verde y captura de carbono”.

Otros hallazgos importantes del informe incluyen:

• La demanda de hidrógeno de Brasil se quintuplicará entre hoy y 2050 en el NZS, alcanzando los 8,3 millones de toneladas métricas a mediados de siglo.

• Los sectores difíciles de descarbonizar, como el acero, el aluminio, el cemento y los productos químicos, enfrentan dificultades para descarbonizarse en un escenario impulsado por la economía sin una mayor intervención política.

• La generosa legislación sobre medición neta ha impulsado un auge de la energía solar a pequeña escala en Brasil. En el escenario base, la capacidad solar instalada alcanzará los 200 gigavatios en 2050.