El Ministerio de Industria, Energía y Turismo está ultimando la regulación sobre el autoconsumo energético. El borrador presentado no ha gustado al sector de renovables. Pero tampoco ha gustado en Bruselas. La Comisión Europea no entiende que el Gobierno proponga una legislación acorde al resto de Europa donde el autoconsumo se ha desarrollado sin incertidumbre y con plena libertad para los ciudadanos.
En el caso español, el Ministerio que dirige José Manuel Soria propone un desarrollo del autoconsumo_ light _por no decir que lo inutiliza. Industria quiere que la generación no se vierta a la red, que el consumidor que desarrolle una tecnología de autoconsumo pague un peaje por entrar a formar parte del sistema, como si de una eléctrica se tratase, mandará inspectores a las casas donde se desarrolle por si no cumplen, por lo que podría acarrear una gran multa. En definitiva, el borrador no podría desarrollar esta nueva forma de vida que en el resto de Europa se está imponiendo.
Ahora, Bruselas tiene los ojos puestos en el Real Decreto. Espera que el Gobierno haga cambios que modernicen la norma presentada y ayuden a desarrollar el autoconsumo. De paso, echaría una mano a un sector que ya de por sí lo está pasando bastante mal con la última regulación. El Gobierno tiene la pelota en su tejado y tiene que actuar. Eso sí, con la Comisión Europea vigilando los pasos a dar.
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