Bulgaria deja desde este viernes de importar petróleo ruso, poniendo fin de forma anticipada y voluntaria a su exención al embargo petrolero de la Unión Europea (UE) contra Rusia como sanción**** a la invasión de Ucrania.
Esta medida cumple con una decisión tomada por el Parlamento búlgaro a finales de 2023, que también incluía la interrupción desde el 1 de enero de la exportación de productos petrolíferos procesados en Bulgaria a partir del crudo adquirido de Rusia.
Bulgaria tenía permiso hasta el 31 de diciembre de 2024 para no aplicar las restricciones aprobadas por la Comisión Europea y era el único miembro de la UE que contaba con una exención para importaciones por vía marítima, el principal método de entrada de crudo en el país.
Sin embargo, en un acto de solidaridad con Ucrania, el Gobierno de Bulgaria, formado por conservadores y liberales, decidió terminar esta exención de manera anticipada.
El petróleo para Bulgaria
En diciembre, tras intensos debates, el Parlamento búlgaro aprobó un cronograma que estipula la reducción de las importaciones a la mitad a partir del 1 de enero, a un 25% desde el 1 de febrero y la suspensión total a partir del 1 de marzo.
Esta decisión tiene un gran impacto en el país, ya que Bulgaria cuenta con una única refinería, propiedad del gigante ruso Lukoil, que suministra casi la totalidad del combustible del país.
Lukoil, que posee la refinería Lukoil Neftochim Burgas -la más grande del sudeste de Europa-, anunció el 5 de diciembre su intención de vender todos sus activos en Bulgaria, incluyendo almacenes de petróleo y una amplia red de gasolineras.
Según el Centro de Estudio de la Democracia, una ONG, Bulgaria importó 43 millones de barriles de crudo ruso durante 2023, con un valor de aproximadamente 2.900 millones de dólares.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios