Climascopio: Los países en desarrollo elevan sus ambiciones de políticas de energía limpia

Los responsables políticos de los mercados emergentes y las economías en desarrollo están elevando sus miras en lo que respecta a las energías renovables, según la empresa de investigación BloombergNEF (BNEF) en la última edición de su encuesta anual Climascopio. Más de nueve de cada 10 países en desarrollo se han comprometido públicamente a instalar y consumir ciertos volúmenes de energía renovable con plazos específicos.

Eso es un aumento del 82% sobre el año anterior y del 67% sobre 2019, según BNEF. Las posibles razones para el cambio podrían incluir el deseo de demostrar progreso antes de las conversaciones climáticas globales de la COP27, la ansiedad por la seguridad energética en medio del aumento de los precios de los combustibles fósiles, los temores sobre el cambio climático o simplemente el atractivo de construir energías renovables porque son asequibles.

El hallazgo es uno de los muchos incluidos en Climascopio, la herramienta, informe e índice de evaluación de mercado disponible públicamente de BNEF que evalúa la preparación relativa de las naciones individuales para hacer que la inversión en transición energética funcione de manera efectiva. Climascopio proporciona instantáneas de la política actual de energía limpia y las condiciones financieras que pueden conducir a la futura implementación de capital y desarrollo de proyectos.

136 mercados, a examen

La edición 2022 de _Climascopio _marca su undécimo año de publicación. El proyecto incluye información detallada sobre 136 mercados a nivel mundial, a saber, 107 mercados emergentes y 29 países desarrollados. Si bien el Climascopio se ha centrado históricamente solo en el sector de la energía, 2022 es el segundo año que cubre no solo la energía limpia sino también la descarbonización de los sectores del transporte y los edificios.

Con respecto a los objetivos de energía limpia a largo plazo de los mercados emergentes, estos solo pueden cumplirse si los formuladores de políticas adoptan políticas de implementación complementarias. En ese frente, el Climascopio ofrece algunos signos prometedores de progreso. No menos del 56% de los mercados emergentes ahora tienen políticas para realizar subastas inversas para contratos de suministro de energía limpia, frente al 49% del año pasado.

La popularidad de la medición neta también ha crecido, con tales políticas implementadas en el 53% de los mercados emergentes en 2022 en comparación con el 49% el año pasado. Además, el 30 % de los mercados emergentes han establecido tarifas de alimentación, que aumentaron del 27 % en 2021.

Políticas de apoyo

La brecha entre los objetivos a largo plazo y las políticas de implementación a corto plazo sugiere que los formuladores de políticas tienen mucho trabajo por delante. Incluso en países que han prometido adoptar subastas de energías renovables, medición neta o ayudas feed-in tariff, puede faltar el seguimiento.

“Sin regulaciones de apoyo, la implementación de políticas por sí sola no puede garantizar que un país atraiga la cantidad de inversión necesaria para iniciar su transición energética”, dijo Sofia Maia, gerente de proyectos de Climascopio. “Entre las 15 naciones desarrolladas y emergentes que terminaron en la parte inferior de la tabla de calificación de políticas energéticas del Climascopio, solo una logró asegurar más de $2 mil millones en inversiones en energía limpia entre 2017 y 2021”.

“Un programa para realizar subastas inversas para contratos de entrega de energía limpia solo es útil si un país realmente ejecuta tales subastas”, dijo Ethan Zindler, jefe de investigación de las Américas en BNEF. “Hemos visto muchos ejemplos de países que establecieron objetivos a largo plazo, aprobaron políticas a corto plazo, pero no las implementaron adecuadamente”.

El análisis de energía limpia del Climascopio también incluye datos sobre inversión y tendencias de despliegue de energías renovables. Además, Climascopio es una herramienta de diagnóstico que califica a las naciones individuales de 0 a 5 en su potencial para atraer inversiones en fuentes de energía sin carbono. Para 2022, Chile fue el mercado emergente con la puntuación más alta en la encuesta, seguido de India, China continental, Colombia y Croacia, en ese orden.