Respaldado por los propios datos del Departamento de Energía británico (BEIS), la caída del sector del carbón desde 2013 ha sido impresionante y ha coincidido con el fuerte crecimiento de la energía solar y eólica. En 2012, el carbón suministró cerca de 150 teravatios hora (TWh) de electricidad al año, que representaban alrededor del 40% de la oferta energética.
Los datos más recientes, sin embargo, revelan que la electricidad generada a partir del carbón en 2016 fue inferior a 30 TWh, siendo la energía eólica por sí sola la mayor fuente de electricidad. El año pasado, la generación de carbón cayó un 66%, según los datos, y no se trata de algo coyuntural.
En la actualidad, el Reino Unido tiene sólo 10 minas de carbón en funcionamiento, frente a más de 1.000 en la década de 1960, y el organismo creado en 2006 con el apoyo del Gobierno para garantizar el futuro a largo plazo de la energía del carbón y la minería, desaparecerá este año porque ya no cumple su propósito, según ha dicho el ministro conservador de la Energía, Richard Harrington.
La caída de los costes de la energía solar y la eólica, aliados con leyes de contaminación más estrictas y fuertes impuestos sobre el carbono, también han sido perjudiciales para el sector , provocando el cierre de las plantas más viejas. De hecho, en este momento, el Reino Unido sólo tiene ocho centrales eléctricas de carbón en funcionamiento.
Tras el primer día libre de fósiles del Reino Unido a principios de este año, los analistas de la energía se han asustado por el ritmo de desaparición de la industria del carbón. “La velocidad a la que está declinando no tiene precedentes”, ha dicho Iain Staffel, del Imperial College. "Nunca hemos visto nada igual. En la década de 1990 hubo un importante declive del gas, pero fue probablemente a una cuarta parte de la velocidad del declive actual del carbón”.
Staffel espera que el número de plantas de carbón en operación se reduzca a dos muy pronto, lo que significa que el Reino Unido probablemente eliminará el carbón por completo antes del plazo fijado de 2025. Staffel añadió que el papel del carbón es ahora "tapar las lagunas" en el sistema de energía cuando la producción de los paneles solares y las turbinas eólicas es baja.
Sin embargo, el mercado de capacidad del Reino Unido todavía vale cientos de millones de libras para los proveedores de carbón, que reciben subsidios para proporcionar energía de respaldo, especialmente durante los meses de invierno. La producción nacional de carbón es prácticamente nula, agregó el informe del BEIS.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios