La actual pandemia de COVID-19 ha puesto de manifiesto la excesiva dependencia de los países respecto de China para llevar a cabo su transición energética. La pandemia ha interrumpido la cadena de suministro global con el cierre de las fábricas chinas. En este contexto, las importaciones solares de India cayeron más del 75% en el primer trimestre de 2020. Sin embargo, la crisis ofrece una gran oportunidad para que el sector solar indio reduzca su dependencia de las importaciones y se centre más sobre la nacionalización de la industria solar a gran escala, dice la firma de análisis GlobalData.
Aproximadamente el 90% de los módulos fotovoltaicos solares indios se importan de China. El Ministerio de Energía Nueva y Renovable (MNRE) declaró que la interrupción de las cadenas de suministro debido al COVID-19 debe considerarse como una calamidad natural por la cual puede invocarse la cláusula de fuerza mayor. Después de esto, el MNRE proporcionó una extensión de tiempo en la puesta en marcha programada de proyectos renovables.
La interrupción en el suministro de equipos procedentes de China tuvo un impacto directo sobre las instalaciones del primer trimestre de 2020 que fueron testigos de una disminución del 43% sobre el mismo trimestre del año anterior. Se ha estimado que la adición de capacidad solar es la más baja desde el cuarto trimestre de 2016.
Los intentos de salvaguardar los intereses de los fabricantes nacionales de energía solar fotovoltaica a través de la implementación del arancel aduanero básico (BCD) y la continua imposición del arancel de salvaguardia podrían haber desempeñado un papel en un mayor descenso en las importaciones solares del primer trimestre de 2020.
Si bien la actividad de importación experimentó una disminución, las exportaciones de energía solar de la India tuvieron buenos resultados en el mismo período. Dado que el bloqueo causó un obstáculo esperado para la fabricación en China, las exportaciones de energía solar de la India registraron un ligero crecimiento interanual en el primer trimestre de 2020. Más del 80% de las exportaciones de energía solar se realizaron a EEUU con un enfoque en la fabricación nacional, las exportaciones podrían aumentar aún más en los próximos tiempos.
Somik Das, analista senior de energía de GlobalData, comenta: “Aprendiendo de los efectos de COVID-19, las naciones de todo el mundo desearían diversificar las fuentes desde donde importan y no concentrar sus importaciones en una nación o región en particular. Es probable que esto permita a la India desempeñar un papel importante en esta reorganización inminente de la cadena de suministro global en la fase postpandémica”.
Para garantizar la sostenibilidad, el crecimiento robusto y las salvaguardas de la industria solar india, las nuevas medidas de la India pueden actuar como brotes verdes para que la industria solar, que ahora depende de las importaciones, se mueva a un modelo de exportación autosostenido. Los cambios recientes en la política de reducir las tarifas solares, la posible extensión de BCD y extender el modelo de asociación público-privada pueden conducir a una transferencia de tecnología más rápida y, en última instancia, a la eliminación de las importaciones a una porción negligente en un horizonte de 3-5 años”.