Las subvenciones a las renovables atrajeron a muchos inversores hacia el sector de la fotovoltaica. Uno de ellos fue el exfutbolista del Real Madrid y la selección española, Raúl González.
El diario El Mundo publica este lunes una información en la que asegura que una juez ordena el embargo de bienes a Raúl por algo más de 9 millones de euros tras una fallida inversión en proyectos de energía fotovoltaica.
Todo empezó en 2008 al calor de las enormes subvenciones a la fotovoltaica. Raúl, a través de su sociedad Europa Scar Sport, se asocia a Aurantia -controlada por la familia Naranjo- y toma un 20% del capital de Cadmos Energías Renovables.
Según cuenta El Mundo, querían montar una fábrica de paneles solares en Cádiz. La idea era dedicar 90 millones, de los cuales unos 30 serían subvenciones y el resto aportaciones y financiación bancaria. Por ello, Cadmos solicitó en 2009 un crédito de 35 millones a Crédit Suisse que todos los socios, incluida la empresa de Raúl, se comprometieron a devolver.
¿Qué pasó? Que la empresa nunca vio la luz, ni se devolvieron las subvenciones ni tampoco el crédito, y claro, la socia de Raúl le exige el pago de su parte de la deuda, que asciende a 7,17 millones, pero que al sumarle intereses y costas asciende a 9,3 millones.
Ahora la juez solicita el embargo, pero Raúl ya se ha cubierto las espaldas, la empresa está en concurso de acreedores.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios