El fondo británico Foresight Solar apuesta por el mercado de las baterías en España junto a Chelion Iberia

Foresight Solar Fund ha dado un paso estratégico significativo en su expansión internacional al anunciar un acuerdo marco con la empresa de ingeniería y fabricación de baterías, Chelion Iberia. Este acuerdo tiene como objetivo desarrollar proyectos de sistemas de almacenamiento de energía con baterías (BESS) en España, incrementando así la cartera de proyectos del fondo sin necesidad de una inversión inicial significativa y con un modesto capital de desarrollo.

El mercado británico de BESS ha enfrentado desafíos notables, tales como la reducción de ingresos mayoristas y la falta de atención por parte de los operadores del sistema hacia los proyectos existentes. Estas dificultades han obligado a los actores del sector a realizar ajustes importantes en sus estrategias operativas y de inversión. En contraste, España presenta un mercado emergente con alta penetración solar y condiciones muy favorables para el almacenamiento con baterías. Estas características convierten al país en una oportunidad atractiva para Foresight Solar, que busca aprovechar estas ventajas competitivas.

Ross Driver, director general de Foresight Solar Fund, subrayó la importancia de este movimiento estratégico. "Foresight Solar Fund tiene como objetivo ser pionera en España, desarrollando proyectos que se integren eficientemente en la red existente. Se espera que estas iniciativas generen rendimientos de dos dígitos, aprovechando las ventajas competitivas del mercado español", afirmó Driver.

La colaboración con Chelion Iberia permitirá a Foresight Solar Fund desarrollar proyectos de almacenamiento de energía que no solo complementen su actual cartera de energías renovables, sino que también fortalezcan su posición en el mercado energético español.

Cóctel perfecto

Se están dando las circunstancias perfectas para que se inicie, además de manera masiva, el desarrollo de las baterías en España pero también en Europa. Es cierto que falta algo de regulación, tal y como comentó Joan Groizard en una entrevista con El Periódico de la Energía, en la que afirmaba que esta iba a ser la legislatura del almacenamiento.

Sin embargo, se están dando circunstancias de mercado que hacen un cóctel perfecto para su desarrollo. Por un lado, el precio de las baterías. Ya comienzan a salir las cuentas de las baterías para autoconsumo, ya sea residencial como para comercial e industrial.

La tecnología de las baterías ya está madura. Ya son unos cuantos mercados los que están trabajando con baterías desde hace tiempo. Por ejemplo, en Australia y California ya están probando enormes baterías para sus problemas de suministro eléctrico e incluso algunos productos ya son maduros y pueden trabajar varias horas a un precio más o menos asequible para un negocio o una industria.

Además, el Gobierno ya ha repartido el año pasado cientos de millones de ayudas para el desarrollo de proyectos de baterías a gran escala hibridados con plantas de renovables. En breve, toca el turno al stand alone, es decir, las que se conectan directamente a la red.