El presidente de Polonia, Andrzej Duda, ha abandonado la Cumbre del Clima (COP24), que se celebra en Katowice, para festejar junto a un grupo de mineros del carbón el día de su patrona, acto que aprovechó para asegurar que no permitirá que "asesinen" a este vital sector de la industria nacional.
Las palabras del mandatario, quien ayer en la inauguración de la cumbre compartió escenario con una cincuentena de líderes mundiales comprometidos con la lucha contra el cambio climático, cambiaron para acercarse a un sector, el del carbón, uno de los grandes emisores contaminantes del país.
Frente a los mineros, Duda se refirió a la COP24 para recordar que, además de organizadores, Polonia está "para decir la verdad de una manera libre de corrección política, que a menudo está dictada por intereses extranjeros".
Los mineros de la cuenca de Silesia, región donde se ubica Katowice, son tradicionales votantes del partido gobernante en Polonia, la fuerza nacionalista Ley y Justicia, a la que está vinculado Andrzej Duda.
En Polonia, casi el 80% de la electricidad se genera a partir de la combustión de carbón.
Por su parte, el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, afirmó también hoy durante una intervención en la Cumbre del Clima que Polonia "es uno de los líderes mundiales en la puesta en marcha de medidas para detener el calentamiento global".
Morawiecki basó sus comentarios en los resultados logrados por este país en la reducción de las emisiones, "en particular mediante el aumento de la cubierta forestal y el apoyo a las negociaciones internacionales sobre el clima".
El jefe del Gobierno polaco también recordó que su país ha conseguido una importante reducción de emisiones en los últimos 25 años, de acuerdo a los compromisos del protocolo de Kioto, a la vez que se ha propuesto un ambicioso plan para desarrollar el transporte eléctrico.
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