Las emisiones de dióxido de carbono (CO2), el principal gas de efecto invernadero, bajaron en Francia un 5,8% el pasado año respecto a 2022, una caída calificada de "histórica" por el primer ministro, Gabriel Attal, y que significa que se situaron por debajo del nivel de 2020.
El primer ministro Attal ha subrayado en el carácter "histórico" del descenso
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En un mensaje colgado en su cuenta de X, Attal se refiere a las cifras de Citepa, una asociación independiente de expertos que cuantifica y evalúa el impacto de las actividades humanas sobre el clima y la contaminación atmosférica.
Las emisiones en Francia
Para Attal, que insiste en el carácter "histórico" del descenso, sobre el que todavía no se ha publicado el detalle, "eso es la ecología a la francesa".
En marzo, cuando en una primera estimación Citepa había calculado que las emisiones habían disminuido un 4,8% en 2023, el dato que se dio fue de 385 millones de toneladas de CO2.
Eso era inferior a los 392 millones de toneladas de 2020, un año muy especial porque fue el año del estallido de la crisis de la covid, con un bajón muy pronunciado de la actividad económica y por tanto con un descenso de las emisiones asociadas.
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