El consejero delegado de Endesa, José Bogas, ha indicado que el Gobierno, las empresas propietarias de centrales nucleares y los reguladores tendrán que tener "cintura necesaria" para ir adaptando el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), en el que se mantiene la senda pactada para el cierre del parque nuclear.
Bogas, que ha participado en el VIII Foro de Energía del diario_ El Economista_, ha señalado, al ser preguntado por el cierre gradual que fija la clausura de la operación de la última central nuclear en España en 2035, que firmaron las empresas dueñas de plantas (Iberdrola, Endesa, Naturgy y EDP) en 2019, que muchas veces no se tiene la información completa cuando se toma una decisión.
Ha reiterado una vez más que "las cosas no están escritas en piedra", por lo que empresas, Gobierno y reguladores deberán tener esa "cintura" para ir adaptándose "en cada momento a lo que sea".
Bogas ha añadido que la seguridad del suministro y la competitividad "tienen que jugar un papel" y ha señalado: "No podemos pegarnos un tiro en el pie porque prime un concepto sobre los otros".
La nuclear para Endesa
En cuanto a una reapertura del debate sobre el cierre de las nucleares, ha dicho que el PNIEC, que mantiene el final de la operación de las nucleares en España para 2035, es un plan "retador y ambicioso" con el que está de acuerdo.
No obstante, ha indicado que, cuando se toman algunas decisiones, no se sabe todo lo que puede pasar y ha dicho que eso se ha visto en los últimos años, aludiendo a la crisis energética de la guerra de Ucrania, que elevó los precios y puso en riesgo el suministro de gas en Europa.
En la revisión del PNIEC que el Gobierno ha sacado a consulta, se contempla que en 2030 habrá 3 gigavatios (GW) de energía nuclear de las centrales que aún estarán abiertas a esa fecha, frente a los algo más de 7 GW que hay ahora.
Los propietarios de las centrales y la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa) pactaron un calendario por el que en 2035 ya dejará de operar la última central nuclear en España.
Bogas ha subrayado que no se puede decir que, siendo el PNIEC "buenísimo", se va hacer ese plan "caiga quien caiga" y ha añadido que es partidario de "estar atentos" y reabrir todos los temas que sean necesarios, pero "sin perder el objetivo al que vamos".
Por su parte, el consejero delegado de Iberdrola España, Mario Ruiz-Tagle, ha manifestado que el almacenamiento es clave para cumplir con el plan de cierre de las nucleares, así como la ejecución de las inversiones en instalaciones que van a reemplazar a la energía nuclear que va a salir paulatinamente del sistema eléctrico.
Ha dicho que España lo hizo mejor que otros países programando ese cierre gradual de su parque nuclear, que el año pasado generó el 20% de toda la electricidad producida en España, donde representa el 6% de toda la potencia de generación instalada.
Ha señalado que para cubrir el hueco que dejará el cierre de las nucleares el almacenamiento es clave para dar estabilidad a la red y acumular la energía renovable.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios