Están de verdad preparados los fabricantes para cumplir los objetivos de emisiones

La electrificación, nos guste o no, es necesaria para que los fabricantes de automóviles alcancen los objetivos marcados por las autoridades en materia de emisiones. Cierto es que hoy por hoy las ventas de los modelos cero emisiones no pasan por su mejor momento, ofreciendo un estancamiento tal que ha provocado que las ventas de coches registren los peores datos de los últimos tres años. Sin embargo, este contexto de incertidumbre y malso resultados no parece frenar los planes de Europa de seguir adelante con los límites de emisiones impuestos y que, año a año, se van a ir recrudeciendo.

El primer escenario se presenta ya en poco más de 90 días, es decir, el próximo 1 de enero de 2025 cuando el límite de emisiones pase de los 116 g/km actuales a 93,6 g/km, es decir, un 20% menos que en la actualidad. En este sentido, parece haber discrepancias acerca de qué hacer con estos nuevos límites ya que mandatarios como Carlos Tavares (Stellantis) mantienen que los objetivos deberían permanecer vigentes, mientras que otros como Luca de Meo (Renault) u Oliver Blume (Volkswagen) han instado a flexibilizar las medidas y reajustar el objetivo, respectivamente.

Evitar multas millonarias

Esto se debe a que muchos fabricantes quizá no consigan cumplir con el límite establecido, teniendo que pagar cuantiosas y multimillonarias multas para justificar sus excesos. Los mismos que se eliminarían vendiendo más eléctricos, como inicialmente se tenía previsto antes de que ocurriera esta desaceleración del mercado. De hecho, un análisis reciente realizado por Dataforce adelante que tanto Volkswagen como Ford serán los más perjudicados ante este cambio.

Todo lo contrario que el último estudio realizado por la Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente (T&E) en el que desglosa las estrategias que se espera que utilicen los fabricantes de automóviles para cumplir con estos objetivos, basándose en la modelización de escenarios de cumplimiento que se apoyan en datos de ventas, planes públicos de los fabricantes y análisis de datos de la empresa de investigación de mercados GlobalData. La conclusión principal es que todos podrán alcanzar los objetivos impuestos tal y como ya hicieran en años anteriores.

Para ello hace referencia al informe recientemente publicado en el que confirmaba que en 2025 la cuota de eléctricos alcanzaría el 24%, es decir, diez puntos más al existente actualmente, respaldada tanto por la expansión de las ofertas de vehículos eléctricos para el mercado masivo, como por la llegada de hasta siete modelos más “asequibles”, con precios inferiores a los 25.000 euros.

Los híbridos, la clave

En el perfecto escenario de cumplimiento proyectado por T&E, la reducción del 20% de CO2 por parte de los fabricantes se lograría vendiendo más híbridos, mientras que las flexibilidades regulatorias contribuirían a una reducción de CO2 del 12%, y los PHEV podrían proporcionar el 8% de las mejoras. Es decir, que los dos grandes grupos que más venden hoy por hoy en Europa, como son Stellantis y Volkswagen dependerían más de las ventas de híbridos para cumplir sus objetivos. Como resultado, a pesar de no ser una opción a prueba de futuro, se espera que la proporción de híbridos ligeros (microhíbridos) se duplique del 19% al 37%. Y es que si las marcas dependen más de los híbridos necesitarían menos eléctricos para cumplir (20%).

Volviendo al ámbito de VW y Ford, también podrían considerar la formación de grupos de cumplimiento con los líderes, como Tesla o Volvo, para reducir la brecha. De hecho, si hipotéticamente VW se uniera a Tesla y Ford a Volvo, solo necesitaría lograr una participación de vehículos eléctricos del 17% y 9% en 2025, frente al 22 y 21%, respetivamente según los cálculos de T&E. Ahora bien, lo que queda claro es que la regulación de las emisiones de CO2 de los automóviles ha demostrado ser eficaz y seguirá impulsando a los fabricantes de automóviles hacia la electrificación. No obstante, también advierte de que debe ir acompañada de políticas nacionales para los vehículos eléctricos: planes maestros de recarga y esquemas de subsidios estables y específicos.