Un año y medio después de su desembarco en Chile con la toma de control de la Compañía General de Electricidad (CGE), en una operación valorada en unos 3.000 millones, Gas Natural Fenosa (GNF) se apresta ahora a crecer en el negocio eléctrico chileno, con su primer proyecto de generación en el país: un ciclo combinado de gas natural con una capacidad instalada de 600 MW.
Desde finales del año pasado la compañía catalana trabaja en el desarrollo de este proyecto que se denomina Tierra Noble y cuya capacidad contratarían con clientes regulados a partir de las futuras licitaciones de suministro. La intención de GNF es instalar la unidad en la Región del Biobío y el presupuesto ronda los 600 millones de dólares.
El desarrollo de este complejo, que sería el primero de una cartera que también contempla el desarrollo de proyectos de energías renovables, está –según publica Diario Financiero- en una fase avanzada, ya que se han completado los estudios de ingeniería e iniciado los contactos con las autoridades regionales y organizaciones sociales.
La intención de la compañía es afinar todo lo que pueda en los trabajos previos a la presentación del proyecto para su evaluación ambiental. La empresa ha preferido llevar el tema con cautela, a fin de evitar las posibles “protestas” en la comunidad que pudieran complicar el desarrollo de la iniciativa.
Según fuentes de la compañía, se están estudiando diversas opciones de tecnologías térmicas, hidráulicas y renovables, y Tierra Noble es una de ellas. La ubicación que GNF explora para su proyecto le permitiría obtener gas natural previamente procesado en el terminal de regasificación de gas natural licuado (GNL) Penco-Lirquén, que está asociado a la central El Campesino, proyecto que es impulsado por inversionistas locales y cuenta con el apoyo de las extranjeras Cheniere y EDF.
Aunque la compañía no ha decidido si se presentará con este proyecto a la licitación del próximo mes de junio, GNF podría también participar en otros dos procesos que el gobierno lanzará en 2017 y 2018, y que podrían adaptarse mejor a la agenda de desarrollo del proyecto.
Global Power Generation (GPG), que tiene 7.000 MW instalados y es el brazo de generación eléctrica de GNF, en el que el fondo Kuwait Investment Authority tiene el 25% de la propiedad, está impulsando este proyecto, el cual está siendo dirigido directamente desde la matriz del grupo.
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