El Gobierno griego ha decretado la movilización forzosa de los trabajadores de la compañía estatal eléctrica DEI después de que un tribunal declarase ilegal y abusiva la huelga que llevaban a cabo en protesta contra la privatización parcial de la empresa.
La portavoz del Gobierno, Sofía Vultepsi, defendió que la medida responde a la "protección del interés público", ya que tras la decisión judicial los trabajadores decidieron mantener la huelga. "En democracia las leyes y decisiones judiciales deben ser respetadas por todos y el interés público es lo más importante", afirmó Vultepsi.
Nada más conocerse la sentencia judicial, poco antes de la medianoche, el sindicato anunció que el paro se mantendría este sábado. La huelga del sindicato de la compañía pública, GENOP-DEI, se inició en la madrugada del pasado jueves para protestar contra el proyecto gubernamental de vender una parte de las centrales de producción de electricidad y de las minas de lignito, la principal fuente energética de este país.
Cortes de luz
Para hacer frente al déficit de producción derivado de la huelga, la autoridad que gestiona la distribución eléctrica ha efectuado algunos cortes puntuales de luz en algunas franjas horarias.
Desde el comienzo de la huelga, el Gobierno del conservador Andonis Samarás amenazó con decretar la movilización forzosa de los trabajadores, ya que definió la privatización como "parte del derecho al progreso" de los griegos.
Sin embargo, GENOP-DEI ha contado con el apoyo de los otros sindicatos del sector público y privado y de los partidos de la oposición que han expresado su malestar por la decisión del Ejecutivo.
El principal partido de la oposición, el izquierdista Syriza, que en los últimos días ha defendido la opción de celebrar un referéndum sobre la privatización de DEI, ha instado al Ejecutivo a retirar el proyecto de ley y lo ha acusado de escoger el "camino del autoritarismo y de la criminalización de las luchas".
Syriza pidió al Gobierno convocar un referéndum para que "sean los ciudadanos los que decidan sobre la naturaleza de su red eléctrica".
El partido comunista (KKE) ha defendido también el "derecho a resistir" de los trabajadores y ha criticado que no pueden luchar contra "las decisiones impopulares".
La privatización parcial de DEI es uno de los seis requisitos acordados con la_ troika_ de acreedores para que Grecia pueda obtener el próximo tramo de 1.000 millones de euros del programa de ayuda financiera, cuyo desembolso correspondía en un principio al mes de junio.
Los empleados de la compañía estatal eléctrica se convierten en el segundo sector al que no le está permitido declarase en huelga, después de que el año pasado el Gobierno hiciese lo mismo con los trabajadores de la compañía de metro de Atenas.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios