En un momento en el que la electrificación está en boca de todos, hay quien no deja de lado al hidrógeno. Una tecnología embrionaria de momento pese a que varios fabricantes llevan años invirtiendo I+D+I en ella e incluso algunos como Honda, Hyundai y Toyota ya han comercializado, a baja escala, algunos modelos (de hecho el pasado mes de enero se matriculó en nuestro país un Hyundai Nexo).
Las principales trabas para no haber visto todavía cómo despegan los vehículos alimentados por pila de combustible se debe, principalmente, al almacenamiento ya sea dentro del propio vehículo, en los tanques destinados a ello, como en la construcción de las propias hidrogeneras. Tanto es así que en España, a día de hoy, hay tan solo dos estaciones públicas y en todo el Viejo Continente el número no llega a las 200. Una cifra muy lejos del más de medio millón de puntos de carga que hay repartido por el territorio europeo. Si abrimos el espectro un poco más, vemos que en todo el mundo el número de hidrogeneras no llega a superar el millar. Algo que podría cambiar a partir del próximo año.
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